Prohens señala que respeta "profundamente" a Pere Rotger y no avanza nada más sobre el futuro de Le Senne - Isaac Buj - Europa Press - Archivo
PALMA 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del Govern, Marga Prohens, ha vuelto a mostrar su rechazo a la condonación de la deuda para Baleares porque, de acuerdo con sus cálculos, el traspaso de esta cuantía al Estado implicaría un aumento de 400 euros de la deuda per cápita que deben asumir los ciudadanos del archipiélago.
Esta ha sido la respuesta de Prohens a la pregunta del diputado de Més per Menorca Josep Castells para que volviera a explicar los motivos por los que se niega a acogerse a esta quita de la deuda anunciada por el Gobierno central.
El diputado ha criticado que no entiende su "obstinación" en renunciar a esta condonación de deuda y ha planteado si antepone los intereses de Baleares a los de la campaña electoral del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo.
Prohens ha contestado que ella "se levanta y se acuesta" con los intereses de los baleares en mente y "no defiende más que sus intereses", en frente de los intereses del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha afirmado que únicamente pretende "mantenerse en La Moncloa".
Castells ha reprochado que con este rechazo a la condonación se puedan perder entre 150 y 170 millones en el pago de intereses de la deuda, que prefiere que esté en los Presupuestos de Baleares que en los del Estado, al tiempo que ha señalado que en el discurso para expresar el rechazo haya un "poso de catalanofobia".
Por contra, Prohens ha sostenido que Castells defienda la condonación con un "complejo de inferioridad" hacia Cataluña, por lo que en definitiva acaba "defendiendo sus intereses".
También ha recriminado que le reclame que se adhiera a un anteproyecto de ley, que "ya se ha tenido que corregir" sin ni siquiera aprobarse y que no se sabe si se aprobará en el Congreso, como ha ocurrido con la reducción de la jornada laboral.
De este modo, Prohens ha aseverado que al acogerse a la quita los baleares asumirían la deuda de los catalanes y otras comunidades, por lo que en lugar de ser un "regalo", es "una traición".
Además, ha planteado que este ahorro no se podría reinvertir en gasto social, motivo por el que ha propuesto que prefiere que Sánchez ponga este dinero en el convenio ferroviario o de carreteras.