PALMA 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El grupo socialista en el Consell de Mallorca planteará al pleno de la institución insular la reprobación del conseller de Turismo, José Marcial Rodríguez, después de que éste fuera denunciado por funcionarios de su departamento por supuestas amenazas, coacciones y un intento de agresión.
Lo harán a través de una moción, que está previsto que se debata en el pleno del próximo 13 de febrero, basada en los hechos denunciados por los trabajadores ante el servicio de información interna del Consell y a través de la cual tratarán de constatar que los hechos que se le imputan son propios de una "conducta abusiva".
Según ha informado el PSIB en un comunicado, la iniciativa para reprobar a Rodríguez pide, como ya han hecho los socialistas en diversas ocasiones, la "dimisión inmediata" del responsable de Turismo e insta al presidente insular, Llorenç Galmés, a "adoptar las medidas necesarias para garantizar la protección de los derechos de los funcionarios afectados y evitar cualquier represalia contra ellos".
Asimismo, pretende reconocer la "importancia fundamental" de los trabajadores públicos como "garantes del interés colectivo" y reafirmar el compromiso del Consell con la defensa de la "transparencia, la verdad y la dignidad" que, a juicio de los socialistas, Rodríguez ha dañado.
La moción, ha apuntado la portavoz del PSIB en la institución insular, Catalina Cladera, llega tres semanas después de que se conociera la denuncia, tiempo en el que el conseller ni ha presentado su dimisión ni ha sido cesado por Galmés, quien se ha convertido en su "cómplice y protector".
"Por eso es necesaria nuestra moción, para forzar que el mismo pleno que fue engañado por Rodríguez sea ahora el que le repruebe", ha subrayado, haciendo referencia a la intervención del responsable de Turismo hace dos semanas en una sesión plenaria extraordinaria en la que negó todas las acusaciones contra él.
La actitud del conseller insular "al sostener su coartada mintiendo en el pleno", para Cladera, es incompatible con el código ético y de buen gobierno del Consell y con los principios de transparencia, respeto y responsabilidad política que se deben regir la gestión pública.
La versión del Rodríguez, siempre según el PSIB, ha sido desmontada por los testimonios de testigos presenciales de los hechos denunciados, quienes han confirmado "en todos los extremos las irregularidades cometidas".