NUEVA YORK, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
El representante especial de Naciones Unidas para Afganistán, Tom Koenigs, pidió ayer que cese toda violencia en el país, con motivo del próximo Día Internacional de la Paz, que tendrá lugar el 21 de septiembre.
Koenigs consideró que la celebración de ese día podría ser aprovechada para desempeñar las labores humanitarias indispensables para la población que a menudo son interrumpidas o retrasadas debido a la falta de seguridad.
En declaraciones a la prensa en Kabul, Koenigs instó a todos los grupos, individuos e instituciones a apoyar este esfuerzo de paz y a prolongarlo más allá del 21 de septiembre. "Todos sabemos del conflicto y la inseguridad en Afganistán, pero en las últimas semanas hemos visto que el país desea la paz", afirmó el diplomático, refiriéndose a la iniciativa lanzada hace dos meses para promover el Día Internacional de la Paz, que ha suscitado el respaldo de una amplia gama de sectores de la sociedad y del Gobierno.
Afganistán ha sufrido casi 30 años de guerras y en el último año y medio también ha padecido una escalada de violencia liderada por los milicianos talibán, recordó el organismo internacional en un comunicado.
