MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
La muerte de dos militares del contingente español desplegado en Afganistán en el marco de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) eleva a 132 el número de bajas de las Fuerzas Armadas españolas en operaciones de mantenimiento de la paz en el exterior.
Tras el fallecimiento el pasado 24 de junio de seis soldados del contingente español en Líbano, al ser alcanzado su vehículo blindado por la explosión de un artefacto explosivo en la carretera de Jiyam, la Brigada Paracaidista ha vuelto a sufrir un nuevo atentado en Afganistán, que ha acabado con la vida de dos soldados y un traductor y ha dejado heridos a otros seis militares heridos, tres de ellos de gravedad.
La Brigada Paracaidista ha sido este año la unidad más golpeada por los ataques terroristas en misiones en el exterior, con un total de ocho bajas en Líbano y en Afganistán. Desde el ataque con mina anticarro que acabó con la vida de la soldado de la BRILAT Idoia Rodríguez Buján el pasado 21 de febrero, las tropas españolas han sufrido en total de trece bajas en misiones en el exterior en 2007 (seis militares en Líbano, tres en Kosovo y otros cuatro soldados en Afganistán).
El último fallecido en Afganistán fue el sargento de Infantería del Ejército de Tierra Juan Antonio Abril Sánchez, que murió el pasado 26 de mayo al volcar su vehículo todoterreno mientras realizaba una patrulla de reconocimiento en la provincia de Badghis. En este accidente además otros dos soldados españoles resultaron heridos leves.
También en Afganistán, el pasado 22 de febrero, la soldado española de la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable Idoia Rodríguez Buján murió por la explosión de una mina de alta potencia en el distrito de Shindand, en el sur de la provincia afgana de Herat. Fue la primera militar española fallecida en misiones en el exterior.
Afganistán es la misión militar española que ha registrado el mayor número de víctimas mortales desde el inicio de las operaciones de mantenimiento de la paz en 1989. En cifras totales, las Fuerzas Armadas españolas han sufrido 84 bajas, incluidas las 62 víctimas del accidente del Yakolev-42, el 26 de mayo de 2003.
También en Afganistán murieron 17 militares tras el accidente del helicóptero Cougar, el 16 de agosto de 2003, y se registraron las dos primeras víctimas mortales por ataques de la insurgencia afgana, los soldados Jorge Arnaldo Hernández Seminario (7 de julio de 2006) e Idoia Rodríguez Buján (21 de febrero de 2007), muertos por sendas explosiones de minas anticarro.
A consecuencia de ataques armados, el hecho más grave se registró el 29 de noviembre de 2003, cuando siete militares españoles que pertenecían al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) murieron en una emboscada en Latifiya (Irak) mientras regresaban a su base en Nayaf desde Bagdad.
BOSNIA, KOSOVO E IRAK
España ha sufrido un total de 20 bajas durante su presencia militar en Bosnia Herzegovina. La última víctima mortal data del 13 de febrero de 2003, cuando falleció el brigada de la Guardia Civil José Andrés Ygarza en un accidente de tráfico.
La participación militar española en Kosovo ha registrado en total siete bajas. Los tres últimas víctimas mortales se registraron en 2007. Los soldados José Javier Colorado y Jorge Ramiro fallecieron en sendos accidentes de tráfico, el primero de ellos cuando volcó su blindado BMR el 24 de abril y el segundo en un colisión frontal con su motocicleta en Atenas el 15 de mayo cuando disfrutaba de un permiso reglamentario.
España sufrió durante su despliegue militar en Irak once bajas. Además de los siete agentes del CNI que murieron tiroteados en una emboscada al sur de Bagdad el 29 de noviembre de 2003, perdieron la vida el capitán de Navío Manuel Martín Oar, en un atentado contra la sede de la ONU, el sargento primero José Antonio Bernal, víctima de un atentado en su propio domicilio y el sargento Luis Puga, que falleció por un disparo accidental.