BOGOTÁ, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
Aulio Isararama Forastero, gobernador de la comunidad indígena de Catru Dubaza Ancoso, en el Alto Baudó colombiano, ha sido asesinado, según han informado las autoridades locales, pasando así a engrosar la larga lista de líderes sociales que han muerto de forma violenta este año en Colombia.
La Asociación OREWA, que agrupa a cinco pueblos indígenas --Embera Dobida, Wounaan, Katío, Chamí y Tule-- ha anunciado la noticia y miembros de Catru Dubaza Ancoso han detallado que ocurrió el martes por la noche, cuando hombres armados le dispararon para después darse a la fuga.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ya ha condenado este crimen y ha asegurado que hará "seguimiento" del mismo. "Solidaridad con comunidad y llamado a investigación oportuna", ha dicho, por su parte, la Organización de Estados Americanos (OEA).
La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) ha subrayado que este nuevo crimen prueba que "el exterminio contra los pueblos continúa". En lo que va de año, han sido asesinados decenas de líderes sociales. De acuerdo con el Gobierno son unos 50, si bien Marcha Patriótica asegura que son 120.
El presidente, Juan Manuel Santos, anunció la semana pasada una "intervención integral" en el departamento de Nariño tras los recientes asesinatos de líderes sociales --hasta ocho en apenas unos días-- a manos de organizaciones criminales que se disputan el control de las rutas de la droga en Tumaco, en la frontera con Ecuador.
Activistas y organizaciones de defensa de los Derechos Humanos han advertido de que la violencia se ha disparado en los territorios que las ya extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han abandonado como parte del acuerdo de paz firmado en 2016.
