VIENA 28 May. (Reuters/EP) -
Austria ha dado marcha atrás a su amenaza de retirar a sus 380 efectivos de la misión de la ONU en los Altos del Golán entre Siria e Israel, argumentando que solo Reino Unido y Francia, y no la UE en su conjunto, están dispuestos a armar a los rebeldes que luchan contra el régimen de Bashar al Assad.
Viena ha encabezado los esfuerzos para ampliar el embargo de armas de la UE sobre Siria, argumentando que enviar más armas a la región impulsará los combates, reduciendo las esperanzas de un acuerdo de paz y convirtiendo a los soldados austríacos en potenciales objetivos de actos de represalia.
Los intentos por renovar el embargo de armas sobre Siria fracasaron el lunes, dejando a Reino Unido y Francia vía libre para suministrar armas a los rebeldes a partir de agosto.
El ministro de Exteriores austríaco, Michael Spindelegger, ha señalado que era crucial evitar un giro de la política europea que por primera vez permitiría el envío de armas a una de las partes en conflicto.
"No hay ninguna autorización de la UE para el suministro de armas, y esto es absolutamente decisivo. Nadie puede decir que nosotros, como europeos, queríamos que la oposición consiguiera el envío de armas de los estados miembro", ha afirmado a la prensa tras el consejo de ministros, subrayando que cualquier país que así lo haga lo hará por iniciativa propia.
Esto ha aliviado la presión sobre Viena para que retire a sus soldados de la misión de la ONU, que suponen el grueso de esta fuerza que supervisa el alto el fuego entre Israel y Siria en la frontera.
Su salida, tras cuatro décadas manteniendo la paz desde la guerra árabe-israelí de 1973, dejaría un gran hueco en la ya afectada fuerza de 1.000 efectivos que separa a los ejércitos de los dos países todavía técnicamente en guerra.
"No tenemos la situación urgente de tener que retirarnos mañana", ha afirmado Spindelegger, aclarando que Austria seguirá revisando las condiciones de seguridad junto con la ONU. Según ha dicho, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, "está completamente de nuestra parte y dice que no necesitamos más armas en Siria".