NUEVA YORK, 1 Nov. (Reuters/EP) -
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha pedido el cese del jefe de la misión de la ONU en Sudán del Sur (UNMISS), el keniano Johnson Mogoa Kimani Ondieki, por una investigación interna que ha revelado "graves deficiencias" que impidieron a los 'cascos azules' proteger a la población civil durante el último estallido de violencia en Yuba.
El portavoz de Ban, Stephane Dujarric, ha anunciado este martes una renovación completa de la cúpula de la ONU en Sudán del Sur. Además del cese de Ondieki, ha avanzado que la enviada especial, Ellen Loj, dimitirá a final de mes.
Los enfrentamientos entre los partidarios del presidente sursudanés, Salva Kiir, y del antiguo líder rebelde, Riek Machar, se reanudaron en julio en la capital dejando cerca de 300 muertos y miles de desplazados internos en apenas unos días.
Organizaciones de defensa de los Derechos Humanos denunciaron la pasividad de la UNMISS frente a este estallido de violencia, incluso ante actos que ocurrieron en el complejo residencial Terrain, a tan solo 1,5 kilómetros de las instalaciones de la organización internacional, en Yuba, y en campos para la población civil dependientes de la ONU.
En respuesta, Ban encargó una investigación interna al general retirado Patrick Cammaert, según la cual "la UNMISS no respondió efectivamente a la violencia debido a la falta de liderazgo, preparación e integración entre varios elementos de la misión".
"La investigación ha determinado que las gestiones de control y mando fueron inadecuadas y que las fuerzas de mantenimiento de la paz mostraron una actitud de aversión al riesgo" que frenó su intervención, ha dicho la Secretaría General en un comunicado.
"Estos factores contribuyeron al fracaso de la UNMISS en su respuesta al ataque de soldados gubernamentales a Terrain", pero los investigadores no han podido verificar las versiones que señalan que los 'cascos azules' no actuaron ante casos de violencia sexual cometidos delante de ellos.
No obstante, Ban ha reconocido las "extremadamente difíciles circunstancias" que afrontó la UNMISS esos días, debido al "fuego cruzado" de la oposición y el Gobierno que --ha recordado-- le costó la vida a dos 'cascos azules'. "182 edificios del complejo de la ONU fueron alcanzados por balas y granadas", ha detallado.
Ban ha expresado su "profunda consternación" por las "graves deficiencias" que han destapado estas pesquisas y que "impidieron que la UNMISS cumpliera su mandato de proteger a la población civil y a su propio personal" en Sudán del Sur.
"El secretario general se encargará de que se den los pasos necesarios para garantizar que la UNMISS protege a la población civil", ha dicho la oficina de Ban, subrayando que eso incluye una mayor rendición de cuentas por parte de los jefes de la misión.
