MADRID 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional (AI) pidió hoy al Consejo de Seguridad de la ONU que apruebe "un embargo de armas general y obligatorio" contra Birmania ante los informes sobre "el creciente número de muertos, heridos graves y detenciones en masa de manifestantes pacíficos por parte de las autoridade".
Amnistía Internacional ha pedido asimismo a los principales suministradores de armas a Birmania, especialmente China e India, pero también Rusia, Serbia, Ucrania y los países miembros de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), que prohíban la intervención de sus agencias, empresas y nacionales en el suministro directo o indirecto de material, munición y conocimientos militares y de seguridad.
"Hay que transmitir urgentemente a los líderes militares de Birmania un mensaje inequívoco para que sepan que ningún miembro de la comunidad internacional va a tolerar ni a alimentar su brutal represión de manifestantes pacíficos", declaró la secretaria general de AI, Irene Khan.
"Es inaceptable que haya Estados que sigan suministrando armas a un Gobierno reponsable de violaciones de Derechos Humanos graves y persistentes, un Gobierno que además está recurriendo ahora a la violencia contra manifestantes pacíficos", prosiguió.
"Hay que aplicar un embargo general de armas hasta que el Gobierno de Birmania adopte medidas concretas para la mejora de la protección de los Derechos Humanos de todas las personas, así como la liberación de todos los presos de conciencia", añadió.
Según Amnistía, la Unión Europea y Estados Unidos han impuesto sendos embargos sobre el suministro directo o indirecto de material militar a Birmania en 1988 y 1993 respectivamente, pero esos embargos, advirtió, "tienen que hacerse efectivos de manera estricta".
SUMINISTRADORES DE ARMAS
Desde 1988, y según fuentes públicas, China ha suministrado al Ejército de Birmania una gran variedad de material militar, como carros de combate, vehículos blindados para el transporte de personal y piezas de artillería como obuses, cañones antitanque, antiaéreos y aeronaves a propulsión. Según Amnistía, China no ha informado a Naciones Unidas de forma habitual sobre sus transferencias de armas.
Por otra parte, en enero de 2007, el ministro de Asuntos Exteriores de la India prometió dar una "respuesta favorable" a la solicitud de material militar que le había formulado el Gobierno de Birmania. En abril de ese año, fuerzas de ambos países realizaron ejercicios militares conjuntos.
Asimismo, prosiguió AI, varios informes remiten a un acuerdo de la India para el suministro de diverso equipamiento militar, como tanques, aeronaves, piezas de artillería, radares, armas pequeñas y un helicóptero ligero multifunción ('Advanced Light Helicopter') que con mucha probabilidad contiene componentes, tecnología y munición originalmente producidos por Estados miembros de la Unión Europea y por Estados Unidos.
También este año, afirmó Amnistía, la Federación Rusa informó a la ONU de que durante 2006 había exportado a Birmania cien sistemas de artillería de gran calibre. Rusia había exportado asimismo a ese país diez aeronaves de combate en 2002 y cuatro en 2001, y la empresa rusa MIG de fabricación de aviones militares contaba en octubre de 2006 en Birmania con una oficina de representación.
En cuanto a Serbia, según la organización, los datos de las autoridades aduaneras indican que entre 2004 y 2006 este país suministró a Birmania grandes cantidades de armas y munición de uso militar.
En abril de 2004, prosiguió Amnistía, la empresa armamentística UkrpetsExport, propiedad del Estado ucraniano, firmó un contrato por diez años para el suministro de mil vehículos blindados para el transporte de personal, cuyo montaje debía realizarse en Birmania. Este contrato formaba parte, según los informes, de un acuerdo más amplio valorado en más de 500 millones de dólares. En 2004, Ucrania declaró a Naciones Unidas la exportación a Birmania, en 2003, de diez vehículos blindados de combate BTR-3U y 10 misiles R-27.