Bush anuncia nuevas sanciones contra Sudán para poner fin al "genocidio" en Darfur

Actualizado: miércoles, 30 mayo 2007 2:01


WASHINGTON, 30 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, anunció ayer la adopción de nuevas sanciones económicas contra el Gobierno de Sudán con el objetivo de acabar con el "genocidio" en la región de Darfur. Inmediatamente, el Ejecutivo del país africano rechazó las medidas por "injustas e inoportunas" y pidió a la comunidad internacional que las ignore.

"Prometo al pueblo de Darfur que Estados Unidos no apartará su vista de una crisis que supone un desafío a la conciencia del mundo", declaró hoy el mandatario norteamericano en su despacho de la Casa Blanca.

Las sanciones afectarán a un total de 31 empresas estatales relacionadas con la industria petrolera sudanesa y a tres individuos concretos, incluido un dirigente rebelde, presuntamente implicados en las matanzas de Darfur.

"Desde hace demasiado tiempo el pueblo de Darfur ha sufrido a manos de un Gobierno cómplice de los bombardeos, asesinatos y violaciones contra civiles inocentes", afirmó el presidente norteamericano. "Mi administración ha llamado a estas acciones por su verdadero nombre: genocidio", prosiguió.

"El mundo tiene la responsabilidad de acabar con esto", añadió Bush, quien instó al Consejo de Seguridad de la ONU, a la Unión Africana y a todos los países del mundo a que "rechacen cualquier intento de obstruir la aplicación de los acuerdos que puedan llevar la paz a Darfur y a Sudán".

"Pido al presidente (Omar) Al Bashir que ponga fin a su actitud obstruccionista y permita la entrada de fuerzas de paz, y que ponga fin a la campaña de violencia que sigue afectando a hombres, mujeres y niños inocentes", prosiguió.

INDIGNACIÓN DE JARTUM

Por su parte, el Gobierno sudanés no tardó en criticar la decisión de la Administración norteamericana, que calificó de "injusta e inoportuna". Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Ali Sadiq, consideró que estas medidas norteamericanas "llegan en un momento en que Sudán está discutiendo activamente la paz en Darfur y trabajando sobre la fuerza híbrida" de la UA y la UE.

Asimismo, Sadiq instó a la comunidad internacional "a que ignore y condene estas sanciones" y se manifestó confiado en que la ONU no está interesada en imponer más sanciones a Sudán, después de que Jartum aceptara el pasado abril el despliegue de un primer batallón de 3.000 soldados de pacificación de la ONU para ayudar a la fuerza enviada por la Unión Africana.

Además, el portavoz sudanés advirtió a Estados Unidos de que su decisión puede "dar una señal errónea" a los grupos rebeldes que operan en Darfur.

El secretario general de la Liga Arabe, Amr Musa, también criticó la decisión estadounidense. "Este no es el momento de sanciones, sino el tiempo de intensificar los esfuerzos de alcanzar un entendimiento", dijo, antes de considerar que las sanciones sólo "llevará un montón de tensión".

LA UE, "ABIERTA A NUEVAS SANCIONES"

Mientras tanto, el alto representante para la Política Exterior y de Seguridad de la UE, Javier Solana, aseguró ayer que el bloque europeo está "abierto a considerar" aprobar nuevas sanciones contra Sudán, si bien matizó que esta posibilidad deberá discutirse la próxima semana, al margen de la reunión de ministros de Asuntos Exteriores del G-8, que tendrá lugar en Heiligendamm, Alemania.

"En principio estamos abiertos a considerar eso (las sanciones)", señaló hoy, al margen de la segunda jornada de la cumbre de los ministros de Asuntos Exteriores de ASEM, entre representantes de Europa y Asia, en la localidad alemana de Hamburgo.

Por otra parte, Solana dijo que el bloque de los Veintisiete también está "abierto a considerar" la creación de un corredor humanitario que vaya desde el vecino Chad hasta Darfur para permitir el tránsito seguro de los cooperantes y empleados humanitarios con el fin de ayudar a aliviar los sufrimientos de las víctimas del conflicto, idea que presentada por el nuevo ministro de Exteriores francés, Bernard Kouchner.

Mientras, la portavoz de Exteriores de la Comisión Europea, Christiane Hohmann, explicó que ni Darfur ni los vínculos de China con Sudán fueron abordados entre representantes europeos y el ministro de Asuntos Exteriores chino, Yang Jiechi, en Hamburgo.

INVERSIONES CHINAS EN SUDÁN

Ayer, el representante especial chino para Asuntos Africanos, Liu Guijing, aseguró que las inversiones de su país en Sudán ayudan a que el país africano acabe con el derramamiento de sangre de la región de Darfur.

Según Liu Guijing, que se anticipaba al anuncio oficial de Bush, las sanciones defendidas por los países occidentales lo único que harán es complicar la situación en la región, en la que, según la ONU, han muerto en cuatro años al menos 200.000 personas y otros 2,5 millones han tenido que abandonar sus hogares.

"El asunto de Darfur y en el este y sur de Sudán tienen como causa la pobreza y el subdesarrollo", consideró Liu, para quien "la cooperación entre China y Sudán ayuda al desarrollo de la economía" de este país y sólo a través del crecimiento "llegará la paz en Sudán".

China, que adquiere las dos terceras partes del crudo de Sudán y ha sido acusada de vender armas al Gobierno de Jartum, pese al embargo existente, ha bloqueado repetidamente desde el Consejo de Seguridad de la ONU los intentos internacionales de aplicar sanciones al país africano.

El Gobierno sudanés ha sido acusado de apoyar a las milicias de los 'janjaweed' en las peores masacres cometidas contra los civiles de Darfur, una región del tamaño de Francia. Sin embargo, Jartum ha negado en todo momento su implicación.