Camboya- Arbour critica el sistema jucial de Camboya al que califica de corrupto y carente de integridad e independencia

Actualizado: viernes, 19 mayo 2006 12:19

PHNOM PENH, 19 May. (EP/AP) -

La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Louise Arbour, criticó hoy el sistema judicial de Camboya, donde se encuentra de visita oficial, afirmando que se enfrenta a serios problemas de corrupción y carece de integridad profesional e independencia para llevar a cabo sus funciones.

"Es el área más importante en la que Camboya necesita hacer progresos para consolidar sus compromisos con la democracia bajo el imperio de la ley", declaró Arbour. Sus críticas se suman a las preocupaciones que tienen muchos críticos sobre el sistema legal del país, y sobre los jueces camboyanos elegidos recientemente para supervisar el tribunal que, con la asistencia de la ONU, juzgará a los dirigentes de los Jemeres Rojos todavía vivos por genocidio y crímenes contra la humanidad.

Arbour hizo estos comentarios al término de tres días de conversaciones con los dirigentes camboyanos, incluido el primer ministro, Hun Sen, para intentar mejorar las tensas relaciones entre Camboya y la ONU y sus agencias. Hun Sen ha expresado abiertamente su desagrado con la oficina de la ONU para los Derechos Humanos y ha descrito a su personal en Camboya como "turistas de largo plazo".

Su comentario, el pasado mes de marzo, vino provocado por el informe sobre la situación de los Derechos Humanos en el país presentado por el enviado especial para esta materia de la ONU, Yash Ghai. Hun Sen pidió que se destituyera a Ghai por decir que el Gobierno no estaba comprometido con los Derechos Humanos.

Hoy, Arbour respaldó a Ghai, al que describió como un distinguido experto que ha ayudado a Camboya a hacer frente a "sus carencias en Derechos Humanos". En su rueda de prensa, la responsable de la ONU dijo que está "plenamente satisfecha" con la garantía que Hun Sen le ha dado de que "su Gobierno nos dará cualquier tipo de cooperación" en cuestiones relativas a los Derechos Humanos, si bien previno de que los problemas del sistema judicial siguen siendo "profundos y muy serios".

Según Arbour, muchos jueces no tienen la formación legal y profesional adecuada, hay "déficits" en la independencia judicial, y "un efecto persistente de corrupción que se siente en muchos sectores de la sociedad camboyana también se deja sentir en el sector judicial".

"Estas tres cuestiones -falta de entrenamiento profesional, insuficiente garantía de independencia y percepción de falta de integridad-- creo que están en el centro del problema que hay que hacer frente tanto con legislación como con un cambio de la cultura", concluyó.