CANNES (FRANCIA), 27 May. (EUROPA PRESS/Jorge Collar) -
Como todo el mundo esperaba, a medida que el Palmarés iba avanzando, la Palma de Oro no dejaba lugar a duras. Sería para 'Cuatro meses, tres semanas y dos días' del rumano Cristian Mungiu; filme de una serie sobre la vida en Rumania bajo la dictadura comunista, que trata del tema del aborto. Una película sobria y que deja un profundo sentimiento de malestar y que además es un arma de dos filos, pues da argumentos a los partidarios de la legalización del aborto, pero aun mas a los enemigos de esta practica.
Todo ello porque Cristian Mungiu insiste en la gravedad del aborto, que muestra además de forma realista en su película, que es por momentos casi una película de horror. Nadie después de ver esta película podrá trivializar el aborto.
Por lo demás, hemos asistido al desfile de actores y actrices, pequeños discursos sobre la importancia de cada premio - los actores, la dirección, el guión, etc. - todo ha marchado normalmente, pues, en el Palmarés del 6O aniversario del Festival de Cannes. Había como punto de partida un pelotón en cabeza, al final hemos encontrado casi todos los nombres retenidos, con alguna sorpresa, prueba de que era verdad lo que anunciaba el otro día el Presidente del Festival, Gilles Jacob. Las palmas otorgadas por los críticos no coinciden nunca con la realidad.
Así, los hermanos Joel y Ethan Coen con su 'No Country for Old Men' no han figurado en el Palmarés, como también estaba ausente otra película favorita: 'Alexandra' de Alexander Sukourov. En cambio, Naomi Kawase se lleva el Gran Premio del Festival por su tercera película, 'Mogari no Mori' ('El bosque de Mogari'), que trata sobre las difíciles costumbres funerarias y el duelo entre los budistas japoneses. Una obra severa y emocionante, con un profundo sentido de la comunión con la naturaleza.
Ha habido un premio extra, el del 60 aniversario, que más que una película premia el conjunto de una obra fílmica. Gus Van Sant, que ya fue Palma de Oro por 'Elephant' y que es un autor 'abonado' al Festival, ha sido pues recompensado sin sorpresa. La obra que presentaba este año, 'Paranoid Park' no creaba un entusiasmo particular.
El premio del mejor director ha sido para Julian Schnabel por 'Le Scaphandre et le papillon', que cuenta una historia prácticamente imposible, pero que es sin embargo perfectamente comprensible. La de Jean-Dominique Bauby, (que interpreta Mathieu Amalric) víctima de un ataque cerebral que le privaba de todo movimiento, salvo el movimiento de un parpado y que conseguía contar su aventura en un libro a través de el simple movimiento de su parpado. Un caso ejemplar de cámara subjetiva que se concreta en una película que sería como la antitesis de 'Mar adentro' de Alejandro Amenábar.
El premio del mejor guión recompensa otro de los favoritos: Fatih Akin por 'Auf der Anderen Seite' que trata de los problemas de las fronteras en la Europa actual, El protagonista, un alemán de origen turco, parte a Estambul en busca de una joven que ha venido justamente a Alemania y que participa en un movimiento político, lo que le vale la expulsión de Alemania y la cárcel en Turquía. Se premia así un cine nacido de la mundializacion producida por los cambios de país en el mundo actual.
Los premios de interpretación van a actores poco conocidos en Occidente. El masculino, al protagonista de la película rusa de Andrei Zviaguintsev, "Izgnanie" (El destierro), Konstantin Lavronenko. Una obra simbólica, impregnada de un profundo sentido religioso que recuerda el cine de Tarkovski.
Paraleladamente la mejor actriz ha recaído sobre la coreana Jen Do Jeon por su extraordinario trabajo en 'Secret Sunshine' de Lee Chang Dong. La obra, adaptación de una novela, es un canto desolado a la desgracia humana. La protagonista, profundamente afectada por la perdida de su marido, mas tarde por el asesinato de su hijo, será un momento atraída por la religión representada por una secta protestante, para volver al final a un estado depresivo de desesperación.
Para terminar con el Palmares competitivo será preciso citar aun el Premio del Jurado que va ex aequo a 'Persepolis', dibujo animado autobiográfico de la iraní Marjane Satrapi realizado en colaboración con el francés Vincent Parannaud y 'Stellet Licht' ('Luz Silenciosa'), del mexicano Carlos Reygadas.
Este autor, que había practicado hasta ahora la provocación (con 'Japón' y 'Batalla en el cielo'), ofrece esta vez una obra meditativa que transcurre en el seno de una secta protestante de origen suizo, establecida en México: los menonitas. En ella se abordan correctamente los temas del pecado, la redención y el perdón. La película parece inspirada por el cine nórdico de Dreyer.
Fuera de la competición, la Cámara de Oro, que puede recompensar todas las primeras películas presentadas en cualquier sección ha ido este año a 'Meduzot' ('Medusas') película israelí de Edgar Keret y Shina Geffen, una cinta que nos habla de la vida en Tel Aviv y que mezcla de forma a veces desconcertante realismo y surrealismo.
