ROMA, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
Uno de los principales acusados del supuesto intento de golpe de Estado contra el presidente Idriss Deby ha negado su implicación en los hechos y ha denunciado que esta historia no es sino un "montaje" del Ejecutivo para atraer el consenso nacional y encubrir ante su país las continuas deserciones de militares.
El ministro de Comunicaciones y portavoz del Gobierno, Hourmadji Moussa Doumgor, aseguró el miércoles en un comunicado que las autoridades habían abortado un golpe de Estado en la noche del 14 al 15 de marzo, en el cual un grupo de rebeldes tenía la intención de derribar el avión en el que Deby tenía previsto aterrizar en D'Jamena procedente de Guinea Ecuatorial.
En una nota publicada por la prensa nacional, citada por la agencia misionera de noticias MISNA, Tom Erdimi --un familiar de Deby caído políticamente en desgracia y acusado por el ministro de estar detrás de la intentona-- negó cualquier implicación en los hechos. "Los chadianos nunca utilizaremos actos terroristas reprobables, como el derribo de aviones en vuelo", aseguró.
Según Erdimi, las explicaciones del Gobierno son un "montaje" para ocultar las deserciones de militares, que suceden "ante los ojos de todos los chadianos, en pleno día". Tom Erdimi dirigió, junto a su hermano gemelo Timan Erdimi --también acusado del complot--, el gabinete civil del presidente.
El último desertor hasta la fecha es el coronel Bokhit Ramadan, considerado "el más fiel de entre los fieles" al presidente y que se ha unido a los militares disidentees que desde hace meses se ocultan en el este del país para derrocar a Deby.
