China.- China niega la entrada al país de una delegación de Reporteros Sin Fronteras

Actualizado: lunes, 10 diciembre 2007 10:20

BEIJING, 10 Dic. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Débora Altit) -

La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha denunciado que China ha impedido la entrada en su territorio a una delegación del grupo que planeaba celebrar hoy en el país el Día de los Derechos Humanos.

Ante la prohibición a entrar la delegación, compuesta por cinco personas, entre ellos el secretario general de RSF, Robert Ménard, se han manifestado en Hong Kong, donde han desplegado una bandera frente a la Oficina de Relaciones del Gobierno chino en la ex colonia en la que los cinco aros de los Juegos Olímpicos aparecen representados en forma de esposas, en referencia a la represión y falta de libertad de expresión existente en el país asiático.

"Inicialmente teníamos previsto manifestarnos en Pekín, pero las autoridades se han negado a concedernos los visados. Sabemos incluso que alguno de nosotros figura en las listas negras de los servicios chinos de inmigración", comentó la organización a través de un comunicado. "Esta negativa pone de manifiesto que Pekín está decidido a prescindir de todos los que molestan", agrega el comunicado.

La organización recuerda que sólo faltan ocho meses para la celebración de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, y que las autoridades chinas se han negado a mantener la promesa de mejorar los Derechos Humanos en su país que hiciera cuando luchaba por hacerse con la sede de los Juegos. Por parte del Comité Olímpico Internacional sólo llega silencio, según RSF

"Nosotros no pretendemos estropear esa gran fiesta del deporte pero ¿quién podrá decir que los Juegos Olímpicos han sido todo un éxito cuando en los centros de detención chinos, a la sombra de los estadios, se pudren miles de presos de opinión? ¿Quién dará cualquier tipo de crédito al eslogan de "Un mundo, un sueño" cuando las minorías tibetanas y uigures sufren graves discriminaciones?", se pregunta en voz alta la ONG.

El 6 de agosto pasado, a sólo un par de días de que se iniciara la cuenta atrás de un año para la inauguración de las Olimpiadas de Beijing, cuatro representantes de RSF, entre ellos su presidente, el español Fernando Castelló y su vicepresidenta, Rubina Möhring, celebraron una rueda de prensa y una protesta similar ante el edificio del comité organizador de los Juegos en la capital.

Tras retener durante un par de horas a los periodistas que acudieron a cubrir el acto, la policía detuvo a los miembros de RSF en su hotel y los trasladó al aeropuerto, obligándolos a salir del país.

China es considerada la mayor prisión de periodistas y defensores de la libertad de expresión por varias organizaciones pro derechos humanos. Según datos de RSF, actualmente existen 33 redactores, 49 ciberdisidentes entre rejas, a los que suman personas críticas con el régimen y encarceladas bajo cargos de "subversión" o de "difusión de secretos de Estado".