China.- La CSI cree que el nuevo proyecto de ley sobre mano de obra contratada "no garantiza los derechos" en China

Actualizado: miércoles, 30 mayo 2007 15:04

MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -

La Confederación Sindical Internacional (CSI) --que representa a 168 millones de trabajadores en 153 países-- ha remitido una carta al presidente de China, Hu Jintao, en la que denuncia que el contenido del nuevo proyecto de ley sobre mano de obra contratada "no garantiza los derechos fundamentales".

En su misiva, la CSI explica que "la falta de fuerza de la legislación, su escasa aplicación y la falta de derechos sindicales de los trabajadores chinos han hecho que éstos sean extremadamente vulnerables a la explotación".

El sindicato lamenta que "no se haga ninguna referencia ni compromiso de permitir que los trabajadores de China formen sindicatos independientes o se afilien a ellos, ni tampoco de que puedan efectuar negociaciones colectivas con los empleadores, conforme a lo estipulado en los convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT)".

Asimismo, "critica la práctica de las autoridades chinas de detener a trabajadores por el mero hecho de ejercer su derecho de libertad sindical --reconocido en el derecho internacional--, y señala las abrumadoras condiciones de salud y seguridad profesionales en las que tienen que trabajar muchos trabajadores". La CSI hace especial hincapié en la situación de la mano de obra femenina que sufre "despidos masivos y constantes violaciones de sus derechos laborales".

Ante esta situación, cree "necesario que el Gobierno chino instaure efectivos mecanismos para garantizar que realmente se supervise la aplicación de los modestos cambios estipulados en el proyecto de ley y que los empleadores no puedan eludir acatarlos, cosa que a menudo hacen actualmente".

En opinión del secretario general de la CSI, Guy Ryder, "las autoridades chinas han dejado pasar una verdadera oportunidad de permitir que sus propios ciudadanos gocen de la mejor garantía de trabajo decente: el derecho de contar con sindicatos que estén bajo su propio control. En ausencia de éstos, los empleadores seguirán pudiendo explotar a su fuerza laboral prácticamente a voluntad y esto no cambiará por muchos retoques que se hagan en la reglamentación".

Ryder también criticó los esfuerzos de las empresas multinacionales que operan en China por oponerse "a las modestas reformas que figuran en el proyecto de ley". "Es de lamentar que esas empresas, entre las cuales hay conocidísimas marcas mundiales que pretenden desear contribuir al desarrollo de China, se hayan estado uniendo entre sí para detener cualquier tipo de reforma a fin de poder continuar obteniendo ganancias gracias a las violaciones de las normas más fundamentales del trabajo que se cometen en los operativos y cadenas de suministros que tienen en China", aseguró.

De todos modos, el sindicato reconoce que algunas de las disposiciones del proyecto de ley "procuran corregir algunas de las más cruciales falencias de la actual legislación laboral" como la aplicación de sanciones a los empleadores que se niegan a contratar a sus trabajadores.