El CICR denuncia que la población civil es la principal víctima de la guerra en Irak

Actualizado: miércoles, 11 abril 2007 14:42


GINEBRA, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

La población civil es la principal víctima de los tiroteos, bombardeos, secuestros, asesinatos y operaciones militares que se registran todos los días en Irak, lo cual supone una "clara violación del Derecho Internacional Humanitario y de otras normas internacionales", según un informe hecho público hoy en Ginebra, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). Esta situación se agrava, según la organización, por el deterioro del sistema sanitario y de gran parte de las infraestructuras básica.

"El conflicto en Irak está causando un inmenso sufrimiento a toda la población civil", comienza el informe, titulado 'Civiles sin protección. El empeoramiento de la crisis humanitaria en Irak'. "Cada día, decenas de personas mueren y muchas más resultan heridas" a causa de la guerra, según el Comité.

"Los actos diarios de violencia tales como tiroteos, bombardeos, secuestros, asesinatos y operaciones militares cuyo objetivo directo son las personas civiles iraquíes" suponen una "clara violación del Derecho Internacional Humanitario y de otras normas internacionales aplicables", advierte la organización, cuyo mandato incluye la supervisión del cumplimiento de los Convenios de Ginebra que regulan las leyes de la guerra.

Aunque el informe deja claro que la actual crisis afecta directa o indirectamente a todos los iraquíes, llama la atención sobre los problemas con que tropiezan los grupos vulnerables, como son los "cientos de miles" de iraquíes que se han visto obligados a huir de sus hogares, así como las familias que "generosamente acceden a acogerlos".

"Los sufrimientos que actualmente padecen hombres, mujeres y niños son insoportables e inaceptables", declaró el director de Actividades Operacionales del CICR, Pierre Krahenbuhl. "Su vida y su dignidad corren continuamente peligro", advirtió.

"El CICR insta a todos los que puedan influir en la situación sobre el terreno a que lo hagan ahora para que se respete y se proteja la vida del común de las gentes", manifestó Krahenbuhl. "De acuerdo con el Derecho Internacional Humanitario, ésta es una obligación tanto para los Estados como para los actores no estatales", aseveró.

DESPLAZADOS

El problema de los desplazados se ha vuelto "particularmente agudo" desde febrero de 2006, cuando el atentado con bomba contra una mezquita chií en Samarra (al sur de Bagdad) provocó una oleada de enfrentamientos entre grupos armados chiíes y suníes.

El CICR estima que aproximadamente 106.000 familias han huido de sus hogares desde esa fecha. Se cree que dos tercios de estos desplazados internos son mujeres y niños que suelen refugiarse en centros de acogida dirigidos por mujeres.

"Miles de iraquíes se siguen viendo obligados a huir de sus hogares, pendientes de las operaciones militares, del deterioro general de la seguridad y de la destrucción de sus viviendas", se lee en el informe.

"La perspectiva es triste, sobre todo en Bagdad y otras zonas en que conviven distintas comunidades, en las que la situación puede aún empeorar", prosigue. En la capital, "las familias suelen tener miedo a salir de sus casas para acudir al trabajo o al comercio o a enviar a sus hijos a la escuela a causa de la violencia arbitraria y ante la amenaza de ser secuestrados para el cobro de rescates", denuncia el documento.

La mayoría de los desplazados han sido acogidos por familias que con frecuencia se ven obligadas a aportar sus "limitados recursos", indica el CICR. "Algunos han encontrado refugio en campamentos, edificios públicos y barracones militares abandonados", asegura el informe.

"La elección de los lugares para buscar refugio", según el Comité, "suele depender tanto de la presencia de familiares o amigos como, a causa de la prevaleciente violencia confesional, de la comunidad religiosa o étnica de las comunidades de acogida".

CRISIS SANITARIA

La crisis coincide además con el "alarmante estado" en que se encuentran las instalaciones sanitarias iraquíes, que adolecen de una importante carencia de personal y suministros básicos, indica el estudio. "El masivo flujo de víctimas a los hospitales debido a los ataques de cada día contra civiles y a otros incidentes violentos genera una tremenda tensión añadida en el sistema de salud", según el informe.

Entre los problemas detectados por el CICR destaca el hecho de que los médicos y las instalaciones sanitarias no dispongan de un estatus especial que les proteja ante las partes en conflicto. Como consecuencia de ello, muchos médicos, enfermeras y pacientes ya no se atreven a ir a los hospitales o a los centros médicos por temor a ser objeto de ataques o amenazas.

El informe destaca también que gran parte de las infraestructuras vitales de suministro de agua, alcantarillado y electricidad de Irak se encuentran en muy malas condiciones a causa de la falta de mantenimiento y porque la inseguridad complica las necesarias obras de reparación.

AYUDA DEL CICR

Gracias a la estrecha asociación con la Media Luna Roja de Irak y al estatuto reconocido que tiene como organización neutral e independiente, el CICR ha podido proporcionar víveres y otros artículos esenciales para la supervivencia de decenas de miles de iraquíes vulnerables, señala el informe.

Actualmente, suministra cada mes asistencia de urgencia para 60.000 personas, de cuya distribución se encarga principalmente la Media Luna Roja de Irak. El año pasado, proporcionó asimismo a los hospitales en todo el territorio de Irak suministros médicos suficientes para atender a 3.000 heridos de guerra.

Aparte, los delegados del CICR continúan realizando visitas a miles de detenidos, a fin de comprobar las condiciones de detención y el trato que reciben, así como para ayudarlos a permanecer en contacto con las respectivas familias mediante las visitas familiares o el intercambio de mensajes de Cruz Roja.