La CNFORS tilda al PYD de "organización antirrevolucionaria"

Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 22:11


MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria (CNFORS) ha tildado este miércoles al Partido Unión Democrática (PYD) --el más importante representante de la comunidad kurda siria-- de "organización antirrevolucionaria" por su anuncio de creación de un Gobierno autónomo interino en el Kurdistán sirio.

Así, ha indicado que el PYD "representa un movimiento separatista que desautoriza toda relación entre él y el pueblo sirio", al tiempo que ha recalcado que "todo acto inconsistente con los principios de la revolución es un enemigo de la misma y un cómplice del régimen".

"Sus actos representan una colusión con el régimen de (el presidente sirio, Bashar) Al Assad, al margen de sus eslóganes", ha afirmado, antes de resaltar que considera al brazo armado del PYD, las Unidades de Protección Popular (YPG), como "una parte de la rama militar del régimen".

En este sentido, ha asegurado que el PYD "está vinculado con agendas externas que abogan por el establecimiento de un nuevo estado dentro de Siria, violando su soberanía, seguridad e independencia nacional".

Asimismo, ha acusado a las YPG de "recurrir a la violencia contra civiles e iniciar hostilidades contra batallones y brigadas del Ejército Libre Sirio (ELS) con el objetivo de apuñalarlo por la espalda (en sus combates contra las tropas gubernamentales)".

"Las YPG han detenido sus combates contra el régimen en múltiples frentes y han fortalecido sus posiciones en las áreas liberadas, amenazando la seguridad de los civiles y restaurando el historial de represión del partido Baaz y el Ejército de Al Assad", ha criticado.

Por ello, ha solicitado a "todos los activistas honestos" del PYD que "rectifiquen el camino lamentable que sigue la organización o declaren su rechazo a la misma y vuelvan a las filas de la revolución siria".

"Los sirios luchan por una nación unida e independiente, libre de la tiranía, así como por una nación democrática en la que los ciudadanos tengan soberanía sobre su propio territorio", ha remachado la coalición.

RESPUESTAS INTERNACIONALES

El anuncio de creación de un Gobierno autónomo kurdo ha sido recibido con "preocupación" por parte de Estados Unidos y ha sido abiertamente rechazado por Turquía, que teme que los avances del PYD en sus intentos de conseguir una mayor autonomía puedan envalentonar al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en suelo turco, y acaben poniendo en peligro el proceso de paz.

Así, la portavoz del Departamento de Estado, Jennifer Psaki, ha indicado que la política de Washington "siempre ha sido apoyar la unidad e integridad territorial de Siria, una Siria unificada". "Estamos preocupados por las informaciones sobre los esfuerzos para declarar una región independiente kurda", ha apuntado.

Por su parte, el ministro de Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, acusó al PYD de "no mantener su promesa". "Les pedimos que evitaran la declaración de una administración 'de facto' que pudiera dividir Siria. Les pedimos que se distanciaran del régimen (del presidente, Bashar al Assad)", dijo.

Así, apuntó que el grupo kurdo ha adoptado una postura "ambivalente". "El error más grave que está cometiendo el PYD es presionar a otros grupos opositores kurdos en las zonas que controla. Recibimos muchas quejas de kurdos (del norte de Siria), y esperamos que cambien su actitud", remachó.

EL COMUNICADO

En un comunicado recogido por el portal de noticias All4Syria, el comité encargado del anuncio de creación del Gobierno autónomo señaló que el naciente organismo estará compuesto por 75 personas y ha agregado que en un plazo de 40 días se creará un comité encargado de redactar una Constitución.

Asimismo, apuntó que "cada partido ha de facilitar un número de miembros para representarlo ante la autoridad interina, que estará integrada por todos los componentes que participarán en el proceso de elecciones".

Posteriormente, este organismo "creará una administración democrática interina tras la finalización de la Constitución", mientras que una comisión interina será autorizada para redactar la legislación que regirá los comicios.

"La administración interina es una autoridad ejecutiva de transición y creará sus instituciones para facilitar sus trabajos a nivel político, económico, sociocultural y securitario", añadió el comité.

En este sentido, detalló que "las fuerzas de seguridad tendrán como misión garantizar la seguridad y estabilidad en las zonas kurdas y se ceñirán al Derecho Internacional y a todas las resoluciones y convenciones aplicables".

El comité se comprometió a organizar "elecciones honestas, abiertas a los observadores y a las ONG internacionales y regionales" en un plazo de seis meses desde la creación de la administración democrática interina.

AVANCES SOBRE EL TERRENO

El anuncio ha llegado en el marco de avances logrados por los grupos armados kurdos, entre los que destacan las YPG, en sus combates en la zona contra la guerrilla extremista Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS), vinculada a la organización terrorista Al Qaeda, y otros grupúsculos asociados.

Las YPG, que controlan la mayoría de las ciudades kurdas de las provincias de Al Hasaka y Alepo, están formadas por jóvenes del Kurdistán sirio con el apoyo de la Unión Democrática Kurda (PYD) y bajo el mando del Comité Supremo Kurdo.

Este grupo, fundado en 2004 después de las revueltas en Qamishli, se declaró de forma oficial tras el inicio de la revolución siria y se ha alzado en armas tanto contra el Gobierno de Bashar al Assad como contra la actual oposición armada.

En julio de 2012, se hizo con varias localidades mayoritariamente kurdas de la provincia de Alepo y desde entonces han asumido la responsabilidad de garantizar la seguridad de las poblaciones kurdas. Pese a su extracción mayoritariamente kurda, entre sus miembros figuran milicianos árabes descontentos con la actual oposición armada siria.

Las milicias kurdas, que han aprovechado el actual conflicto armado sirio para reclamar los derechos que les han sido negados durante años por Damasco en el noroeste del país, han expresado su temor de que el triunfo de los movimientos rebeldes no contribuya a la consecución de la ansiada autonomía y han recordado, al respecto, el apoyo dispensado por las autoridades turcas --enfrentadas a sus propios independentistas kurdos-- a los insurgentes sirios.

Desde que comenzó la guerra civil en Siria, en marzo de 2011, más de 110.000 personas han muerto a causa de los combates y más de seis millones de personas, incluido un millón de niños, se han visto obligadas a abandonar sus hogares.