Crónica China.- Niños y mujeres de las zonas rurales son los más vulnerables al tráfico de seres humanos en China

Actualizado: miércoles, 4 abril 2007 15:00

Las autoridades aseguran que en 2006 hubo 2.500 casos de tráfico, pero Save the Children cree que la cifra real es mucho mayor

BEIJING, 4 Abr. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -

Los niños y las mujeres de las zonas rurales chinas, especialmente de aquellas con poblaciones de etnias minoritarias que a menudo ni siquiera hablan mandarín, se encuentran entre el grupo social más proclive a convertirse en víctima del tráfico humano en el país asiático, de acuerdo con la responsable en China y Corea del Norte de la organización no gubernamental británica Save the Children, Kate Wedgwood.

El fenómeno del tráfico de personas, según señaló hoy Wedgwood en un encuentro con la prensa extranjera en Beijing, es un fenómeno complejo que no se restringe al secuestro de mujeres para prostituirlas. Una de las principales dificultades existentes en China es que la regulación al respecto es mucho más limitada que la legislación internacional, ya que sólo hace referencia a menores de 14 años vendidos o secuestrados para utilizar sus servicios, por ejemplo en la prostitución o en trabajos forzados.

"Es muy difícil ofrecer números sobre la cantidad de niños que terminan siendo víctimas del tráfico", declaró Wedgwood, que sin embargo no dudó en tachar de "demasiado bajas" las cifras oficiales ofrecidas por China, que indican que en 2006 hubo 2.500 casos de tráfico; una cifra que, en opinión de la experta, parece hacer referencia más bien el número de casos descubiertos.

"Sólo en las ciudades, dedicados a mendigar o en actividades criminales como robos y drogas, hay probablemente decenas de miles de estos niños, gran parte de ellos varones procedentes de la región occidental de Xinjiang. "Pero muchos padres no informan porque ni siquiera lo contemplan como tráfico, ya que a cambio les envían dinero", explicó la directora de la ONG.

El precio que se puede pagar por un niño varía notablemente en función de su sexo, ya que un varón puede costar entre 10.000 y 20.000 yuanes (unos 1.000-2.000 euros) y una niña alrededor de diez veces menos. Muchos de ellos terminan siendo vendidos y adoptados por parejas sin hijos o dispuestas a pagar la multa que se impone a los que no acatan la política del hijo único. Y algunas regiones deprimidas del país acaban convirtiéndose en una suerte de "fábricas de niños".

LA SITUACIÓN DE LOS NIÑOS

Wedgwood, cuya ONG se estableció en China en 1999, reconoce que cuando llegaron al país asiático se sintieron "conmocionados" ante la falta de atención dedicada por las autoridades chinas a la situación de los niños.

Los provenientes de minorías rurales son los más desprotegidos, y Wedgwood afirmó que no es raro que mujeres de estas etnias y sin apenas educación sean amenazadas por haber incumplido las políticas de planificación familiar, y obligadas a entregar a sus hijos para evitar castigos o multas.

Pero también existen otros grupos de riesgo, como los hijos de los enfermos de sida, los niños discapacitados o los niños abandonados en manos de abuelos u otros familiares por padres que se trasladan a las ciudades en busca de trabajo (y que contabilizan, según las cifras oficiales, una masa de población flotante de unos 200 millones de personas).

La emigración es un factor que exacerba el tráfico de niños, por lo que Save the Children, según su directora para China, ha trabajo en proyectos destinados a proteger a los niños en sus comunidades en provincias como Yunnan, Guangxi y Xinjiang, todas ellas con altas proporciones de población de minorías étnicas.

El fin de estos programas es proteger a los niños en sus comunidades, logrando su integración a nivel local. "Organizamos actividades para que las comunidades sean consciente de los peligros que existen. La idea es que apoyen a los niños, que el mundo adulto les escuche", manifestó.

China es lugar de origen, tránsito y destino del tráfico humano. La mayoría del tráfico es de carácter nacional, pero también existe una importante cifra de mujeres y adolescentes chinas forzadas a prostituirse en lugares como Taiwán, Tailandia, Malasia o Japón, según el informe sobre tráfico de personas elaborado en 2005 por el Departamento de Estado estadounidense.

MUJERES Y NIÑAS

A nivel nacional, Wedgwood señaló que durante los años 80 y 90 era frecuente el caso de tráfico de mujeres para venderlas como esposas. Más recientemente, además de aumentar los casos de mujeres vendidas como mano de obra, se han documentado los casos de "bebés criadas para convertirse en futuras esposas".

En un país en que la política familiar del hijo único unida a la tradicional preferencia por la descendencia masculina ha terminado provocando un desequilibrio de sexos que crece cada año, y que actualmente se sitúa en 119 varones nacidos por cada 100 niñas (aunque en algunas regiones del sur del país la proporción es de 130 niños por cada 100 niñas), la experta no dudó en advertir de que "el desequilibrio de sexos será un factor que conducirá a un aumento del tráfico" de seres humanos.