Crónica Nobel.- El francés Albert Fert y el alemán Peter Gruenberg ganan el Nobel de Física por el hallazgo de la GMR

Actualizado: martes, 9 octubre 2007 16:19

La Magnetorresistencia Gigante, descubierta independientemente por ambos en 1988, ha aumentado la capacidad de los discos duros

ESTOCOLMO, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -

El francés Albert Fert y el alemán Peter Gruenberg han obtenido el Premio Nobel de Física 2007 "por el descubrimiento de la Magnetorresistencia Gigante (GMR)", un importante avance en el almacenamiento de información que ha permitido aumentar la capacidad de los discos duros, según informó hoy el Comité Nobel.

"El Premio Nobel de Física de este año recompensa la tecnología utilizada para leer la información almacenada en discos duros", se lee en el comunicado de la Real Academia Sueca de Ciencias. Albert Fert nació en 1938 y trabaja en la Universidad París Sur y en la Unidad Mixta de Física CNRS/THALES en Orsay, en Francia. Por su parte, Peter Gruenberg nació en 1939 y ejerce en el Centro de Investigaciones (Forschungszentrum) de Julich, en Alemania.

Ambos descubrieron en 1988, cada uno por su parte y de forma independiente, la Magnetorresistencia Gigante (GMR), un efecto mecánico cuántico consistente en el uso del espín de un electrón (una de las propiedades de las partículas) que ha permitido el desarrollo de pequeños cabezales de lectura de los discos duros y, por consiguiente, la miniaturización de los discos duros de los ordenadores.

"Los cabezales de lectura sensibles son necesarios para leer los datos memorizados en los discos duros compactos integrados, presentes en los ordenadores portátiles y en algunos lectores de música", continúa la Real Academia sueca. El sistema, comercializado por primera vez por IBM en 1997, multiplica por cien la capacidad de almacenamiento en discos duros de ordenador u otros medios magnéticos, como cámaras de vídeo o equipos de música.

Este descubrimiento "es muy útil para la lectura de discos duros en los que la información memorizada debe convertirse en corriente eléctrica", afirma el comunicado del Comité Nobel. "Muy poco después del descubrimiento, investigadores e ingenieros se pusieron en la tarea de explotar este efecto en los cabezales de lectura", prosigue.

"Tras el lanzamiento del primer cabezal basado en el efecto GMR en 1997, esta tecnología fue rápidamente estandarizada, e incluso hoy en día todas las novedades técnicas de lectura derivan de la GMR", añade.

"El efecto GMR fue descubierto gracias a las nuevas técnicas desarrolladas en los años setenta para fabricar capas ultrafinas de diferentes materiales", explica la Academia sueca. Este descubrimiento, prosigue, "puede ser también considerado una de las primeras aplicaciones reales del campo prometedor de la nanotecnología" que se aplica en dispositivos de tamaño minúsculo. "Ha sido gracias a esta tecnología que ha sido posible una miniaturización radical de los discos duros en los últimos años", prosigue el texto.

El año pasado, el Nobel de Física correspondió a los estadounidenses John C. Mather y George F. Smoot por sus estudios sobre los primeros momentos del universo, que han contribuido a comprender las galaxias y estrellas y han apoyado la teoría de la 'Gran Explosión' ('Big Bang') sobre el origen del cosmos.

RESTO DE PREMIOS

Ayer fueron galardonados los estadounidenses Mario R. Capecchi y Oliver Smithies y el británico Martin J. Evans con el Premio Nobel de Medicina 2007 por sus descubrimientos sobre la manipulación genética en ratones transgénicosm una técnica que ha permitido a la ciencia determinar por qué ciertas enfermedades afectan al ser humano a nivel celular y aumentar el conocimiento sobre numerosos genes en estado embrionario, la fisiología adulta, el envejecimiento y la enfermedad

Con éstos ya son dos los Premios concedidos este año. Quedan por anunciarse los galardones de Química, Literatura, Paz y Economía. Los premios son entregados cada año el 10 de diciembre, en el aniversario de la muerte del fundador del galardón, Alfred Nobel, fallecido en 1896.

El galardón de la Paz se anuncia en Oslo, mientras los otros lo son en Estocolmo. Los premios, cada uno con una compensación económica de 1,09 millones de euros, fueron creados por el empresario sueco Alfred Nobel en su testamento.