LONDRES, 10 Ago. (Reuters/EP) -
Los delitos de odio en Reino Unido aumentaron después de los tres últimos atentados islamistas registrados este año en Londres y Manchester, pero las cifras descendieron rápidamente los días siguientes por las muestras de "apoyo y unidad" en el país, según ha informado el Consejo Nacional de Jefes de Policía (NPCC, por sus siglas en inglés).
"Sabemos que los atentados terroristas y otros eventos nacionales e internacionales pueden provocar aumentos temporales de los delitos de odio y, por lo tanto, debemos ser muy cuidadosos manejando las tensiones entre comunidades después de los acontecimientos recientes", ha declarado el portavoz de la NPCC para este tipo de criminalidad, Mark Hamilton.
"Los informes de las fuerzas de seguridad muestran que los niveles alcanzaron un pico después de los ataques pero descendieron en unos días. Lo ocurrido concuerda con tendencias observadas anteriormente, aunque sigue siendo una preocupación real para el servicio de Policía y la sociedad", ha indicado.
En marzo, un hombre atropelló y mató a cuatro personas en el puente de Westminster antes de apuñalar a un agente de Policía a las afueras del Parlamento. A este suceso le siguió el atentado de mayo en un concierto de Ariana Grande en Manchester que acabó con la vida de 22 personas y otro cometido a principios de junio en el Puente de Londres y en zonas de ocio cercanas que se saldó con ocho muertos.
La Policía británica registró 62.518 delitos de odio entre 2015 y 2016, cerca de 171 diarios. La cifra aumentó a 234 dos días después del atentado en Westminster, 273 tras la explosión en Manchester y 319 después de los ataques en el puente de Londres. Sin embargo, no hubo picos similares tras el asesinato de una persona a la salida de una mezquita.
Los números cayeron notablemente siete días después, aunque se mantuvieron en un nivel significativamente superior a los del mismo período en 2016. Algo que la Policía ha atribuido a un aumento de las denuncias y mejoras en el registro de los delitos.
