EEUU admite que las fuerzas afganas no son plenamente autosuficientes

Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 22:06

BRUSELAS, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno estadounidense ha reconocido en un informe remitido al Parlamento que las fuerzas de seguridad afganas no son plenamente autosuficientes y necesitarán todavía más apoyo para garantizar que el progreso que han hecho sea "permanente".

"Las capacidades de las fuerzas de seguridad afganas no son plenamente autosuficientes y serán necesarios esfuerzos considerables para hacer el progreso permanente", señala el informe de Hagel.

La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), bajo mando de la OTAN, ya ha reconocido que las fuerzas afganas todavía necesitarán apoyo en materia logística, de mantenimiento, transporte aéreo y apoyo aéreo para operaciones.

"Este apoyo de facilitación se reducirá en 2014 y será difícil que la FNSA lo sustituyan plenamente", reconoce el informe.

El informe advierte de que una vez concluya la misión actual de combate de la OTAN a finales de 2014 en el país asiático las fuerzas afganas "estarán en un nivel de riesgo elevado sin la ayuda continuada de la comunidad internacional y la asistencia de la fuerza de la coalición continuada, incluido en asesoramiento institucional".

"Con asistencia, sin embargo, las fuerzas de seguridad afganas se mantendrá en el camino hacia una capacidad duradera para superar a los talibán", asegura el informe, que admite que la insurgencia ha consolidado su poder en algunas zonas rurales donde tradicionalmente lo mantenían.

"Además de las incertidumbres sobre la sostenibilidad de las fuerzas de seguridad afganas y los desafíos de seguridad fuera de las zonas urbanas, los desafíos de la economía y la gobernanza continúan a alentar la incertidumbre sobre las perspectivas de estabilidad a largo plazo" en el país, advierte el informe.

Parte de los problemas de sostenibilidad de las fuerzas afganas tiene que ver con el aumento de bajas entre sus filas ahora que ya están en primera fila de la seguridad en todo el país, con apoyo de las fuerzas internacionales.

Las fuerzas afganas realizan el 95 por ciento de las operaciones convencionales y el 98 por ciento de las operaciones espaciales en el país y aunque el número de ataques de la insurgencia ha caído un seis por ciento en comparación con hace un año el número de bajas entre las filas afganas ha aumentado un 79%, mientras que las de las fuerzas de la coalición han caído un 59 por ciento.

El informe reconoce con todo que durante la sesión de combate en 2013 las fuerzas afganas han liderado las operaciones de combate y han consolidado el control del Gobierno afgano en las zonas urbanas.

La OTAN y sus socios se plantean dejar una fuerza de entre 8.000 y 12.000 efectivos sobre el terreno a partir de 2015 en el marco de la nueva misión de entrenamiento, asesoramiento y asistencia a las fuerzas afganas, aunque no se han cerrado cifras y cuyo despliegue está totalmente condicionado a que Estados Unidos y Kabul concluyan un acuerdo de seguridad bilateral que garantice que no se aplicará la jurisdicción afgana a las tropas que se queden sobre el terreno.

Este acuerdo servirá de base para que la OTAN negocie un acuerdo sobre el Estatus de la Fuerza para dar cobertura a las tropas del resto de países que participará en la nueva misión.