WASHINGTON, 26 Jul. (EP/AP) -
El Senado estadounidense aprobó hoy destinar otros 3.000 millones de dólares a la vigilancia y seguridad de la frontera con México, de manera que podría sobreseer el veto que el presidente del país, George W. Bush, había prometido respecto a la partida de Seguridad Interior financiada con 38.000 millones de dólares.
El acuerdo respaldó el plan republicano iniciado ayer para aprobar algunas de las reformas más populares contenidas en el fracasado plan de inmigración de Bush, incluyendo fondos para contratar más agentes de la Patrulla Fronteriza y prolongar y reforzar la valla de seguridad en la frontera con México.
Los demócratas están de acuerdo con las condiciones económicas, pero se opusieron a propuestas republicanas como permitir a la Policía investigar a las personas sobre su estatus inmigratorio y detener y expulsar a los que violen la duración de sus visados.
El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, y su homólogo republicano, John Cornyn, zanjaron durante la noche del miércoles sus diferencias y anunciaron hoy el acuerdo. Cornyn obtuvo la promesa de que parte de ese dinero será destinado a detener y deportar a los inmigrantes que entraron legalmente en Estados Unidos pero se quedaron tras expirar sus visados.
La Casa Blanca se opone a la legislación, así como algunos republicanos de peso. Bush prometió vetar el proyecto de ley sobre seguridad interna por contener 2.300 millones de dólares más de los solicitados por el mandatario.
Ahora, partidarios incondicionales de Bush entre las filas republicanas del Congreso, como el senador Judd Gregg, están dispuestos a sobreseer el veto presidencial.
Cornyn pronosticó que el proyecto "será aprobado por un margen a prueba de veto", y el senador republicano Lindsey Graham dijo a los medios de comunicación que el proyecto podría recibir 90 de los 100 votos en la Cámara Alta.
El proyecto de ley reforzará el "control operacional" de la frontera con México mediante la contratación de más agentes de la Patrulla Fronteriza, vehículos, mejora de barreras y vallas y torres de observación, además de incluir la propuesta de Cornyn de aumentar las detenciones y expulsiones de los permanezcan ilegalmente en Estados Unidos tras la expiración de sus visados.
