EEUU.- El vicegobernador de Carolina del Sur pide a su jefe que renuncie tras su lío de faldas con una argentina

Actualizado: jueves, 27 agosto 2009 0:34

NUEVA YORK, 26 Ago. (del corresponsal de EUROPA PRESS, Emilio López Romero) -

El vicegobernador del estado de Carolina del Sur, Andre Bauer, ha pedido a su jefe, el gobernador Marc Sanford, que presente su renuncia después del escándalo que se ha desatado por el lío de faldas que tuvo con una ciudadana argentina, y aseguró que no se presentará como candidato en las elecciones de 2010 si abandona el cargo.

Bauer considera que los ciudadanos de Carolina del Sur se han visto sacudidos por un escándalo que va más allá de la vida personal del gobernador, cuya mujer y sus hijos han abandonado la residencia oficial, ya que se ha puesto en duda la legalidad de los viajes de Sanford, incluido los que realizó a Buenos Aires para visitar a su amante.

El mandato de Sanford concluye en enero de 2011 y el vicegobernador ha dicho en una rueda de prensa que intentó darle el beneficio de la duda pero que finalmente ha decidido pedirle que renuncie porque está preocupado por las voces que piden un juicio político y para evitar que el escándalo acabe dominando los debates del próximo año.

Bauer, la figura republicana más importante que ha pedido su renuncia, no quiere que en el Congreso local se esté hablando de si el gobernador se acostó con su amante o si su esposa debería haberle dado una oportunidad, e insiste en que los temas que realmente interesan a los ciudadanos son la creación de empleo o las medidas que permitan poner fin a la grave crisis económica.

La prensa local ha revelado que Sanford, que tuvo que admitir el romance el pasado mes de junio, ha realizado hasta un total de 35 viajes en aviones privados sin mencionarlos públicamente, a pesar de que la legislación estatal obliga a los funcionarios públicos, incluido el propio gobernador, a comunicar los regalos recibidos de menos de 25 dólares "o cualquier cosa de valor" de menos de 200 dólares.

El gobernador era uno de los políticos con más futuro dentro del Partido Republicano y su nombre figuraba en las quinielas de posibles candidatos para las presidenciales de 2012, aunque su posible asalto a la Casa Blanca se vio truncado de un plumazo después de que reconociera públicamente que fue infiel a su mujer.

Los rumores comenzaron cuando 'desapareció' literalmente de la escena pública durante cuatro días. Ante las preguntas de la oposición, y después de que su propia esposa reconociera que no tenía noticias de su paradero, su oficina afirmó que estaba haciendo senderismo en los Apalaches. En realidad estaba a miles de kilómetros de distancia, en la ciudad de Buenos Aires, en compañía de su "buena amiga".