El efecto de los incendios podría desequilibrar la balanza a favor del Pasok en las parlamentarias

Actualizado: sábado, 15 septiembre 2007 12:38


MADRID, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -

Las 66 vidas y los 3.000 kilómetros cuadrados de tierra fértil que se cobraron los pasados incendios del mes pasado podrían tener un efecto determinante en las elecciones al Parlamento griego que se celebran mañana domingo, y en las que el partido en el poder, Nueva Democracia (ND) del primer ministro Costas Karamanlis, se aprovecha de lo que ha sido, a su entender, una excelente campaña de ayuda al desastre; frente a las acusaciones de negligencia formuladas por su principal opositor --y segundo en las encuestas a siete décimas de distancia--, el Movimiento Socialista Panhelénico (Pasok) de Giorgos Papandreu.

A sólo 24 horas de los comicios, el resultado es impredecible. La última encuesta publicada el pasado 31 de agosto, fecha límite para la publicación de sondeos, concede al ND un 31,5 por ciento de intención de voto por un 30,8 por ciento a favor del Pasok. Aunque el ganador es incierto, todo apunta a que terminará constituyéndose una Cámara Baja conformada por cinco partidos (los dos mencionados más el Partido Comunista Griego, la Coalición de la Izquierda Radical --SYRIZA--, y la Concentración Radical Ortodoxa).

Ahora bien, gane quien gane deberá hacerlo por mayoría, porque el primer ministro Karamanlis anunció, a principios de esta semana, su intención de repetir los comicios antes de permitir un Gobierno de coalición, porque a su entender "la cooperación parlamentaria con el resto de partidos es imposible", en declaraciones al diario 'Eleftheros Typos'. Los sondeos afirman que el porcentaje de indecisos oscila entre el 13 y el 20 por ciento, cuyo voto resultará esencial en las elecciones de mañana.

EFECTO DEVASTADOR

A día de hoy, es difícil estimar los efectos a largo plazo de los fuegos que han arrasado Laconia, Mesenia, Ileia y Arcadia --en total, un 2,3 por ciento del total de la superficie del país--. Pero está claro que la agricultura griega ha sufrido su mayor golpe en décadas. Los incendios han acabado con la cosecha veraniega de la uva, de los cítricos y de las aceitunas; y los agricultores no sólo habían perdido los ingresos de un año entero, sino los medios necesarios para subsistir durante las próximas temporadas.

Ante esta situación, el Gobierno decidió saltarse el papeleo a la hora de conceder ayudas económicas a los agricultores, que empezaron a llegar el pasado día 28, cuando algunos de los incendios todavía permanecían activos. A principios de este mes, los servicios de ayuda ya estaban empezando a aislar las colinas arrasadas, para prevenir la erosión del suelo, y Karamanlis anunció el 31 de agosto una serie de programas de reforestación para reponer el terreno arrasado.

No obstante, muchos ven estas ayudas como un intento de compensar las deficientes políticas inmobiliarias mostradas a lo largo de una legislatura que comenzó en 2004 y que ahora, está en el punto de mira no sólo del Pasok, sino del mismo Parlamento Europeo, que ha acusado a Grecia de ser el único país de la UE que carece de un registro de tierras completo, a pesar de haber recibido 100 millones de euros para resolver esta cuestión. Por ello, y en la resolución adoptada el pasado 4 de septiembre, el PE determinó que "no se permitirán cambios de propiedad" aprovechando el desastre, temiendo que la propuesta del Gobierno para enmendar el artículo 24 de la Constitución termine arrebatando la propiedad de millones de hectáreas de bosque y zonas protegidas, ahora quemadas, de manos de los afectados.

"Es una desgracia que los constructores se aprovechen de estos desastres para construir en terreno forestal", lamentó el eurodiputado sueco por los Verdes, Carl Schlyter. De la misma opinión era su correligionaria alemana Elisabeth Schroedter, que señaló a "los agujeros legales" del Derecho griego como "responsables, en parte, de estos terribles incendios. Hay que rechazar la especulación inmobiliaria", determinó la eurodiputada.

Aprovechando las circunstancias, el Pasok ha presentado, a lo largo de la campaña, soluciones más precisas y más a largo plazo. El partido de Papandreu ha anunciado que, si gana los comicios, pondrá en marcha un plan para congelar las deudas de los agricultores durante los próximos tres años, y concederá una ayuda mensual de no menos de 1.000 euros por afectado durante el próximo lustro, intentando incrementar los ingresos del turismo y concediendo subsidios para facilitar el proceso de envasado y enlatado de los alimentos cosechados antes de los fuegos, compensando así parte del déficit económico generado por el desastre.

Sin embargo, a lo largo de esta legislatura, ambos partidos han desdeñado el medio ambiente en favor del crecimiento económico. A partir de ahora, de alguna forma, van a tener que trabajar en ambos aspectos al mismo tiempo, porque las consecuencias medioambientales del incendio no sólo han dejado al país vulnerable a nuevos fuegos, sino que han convertido la costa occidental de la península del Peloponeso en un desierto. El descuido del ND por el medio ambiente le pasará factura: estos últimos cuatro años, ha incrementado la producción de energía con fuentes no renovables y ha prestado poca o casi ninguna atención a las energías solar, eólica o geotérmica, que la República Helénica posee en cantidades privilegiadas.

LUCHA DE DECLARACIONES

"Está claro que existen ciertas debilidades (en la respuesta del Estado)", admitió el diputado y hombre fuerte de Karamanlis en el Parlamento, Apostolos Stavrou, al diario 'Athens News'. Como muchos miembros del ND, Stavrou apunta a una posible conspiración como móvil de los incendios, pero siempre ha descartado que el fuego haya sido "cuestión de una buena o mala organización" y que a pesar de "los muchos efectivos disponibles" era "imposible impedir lo que ha sucedido".

Sin embargo, Nueva Democracia presenta opiniones discordantes, como la de su diputada Katerina Papacosta, que ha considerado "un grave error" que el Gobierno intente favorecerse políticamente del desastre. Con todo, Papacosta sí que defiende la enmienda del artículo 24, pero "en una dirección más ecológica", y sobre todo impidiendo que "se construya en las zonas afectadas", siguiendo las directrices del Parlamento Europeo.

Para el Pasok, no obstante, ésta es la gran oportunidad para regresar al poder tras siete años de ausencia, después de ser derrotado en 2000 por el ND, entre acusaciones de corrupción, a pesar de la buena imagen de la que siempre gozó su entonces líder, Costas Simitis, sucesor del legendario Andreas Papandreu.

"Está claro que los incendios afectarán de forma negativa a Nueva Democracia, porque lo que ha sucedido es terriblemente serio, y el fracaso del Gobierno a la hora de gestionar, incluso, las operaciones de rescate se ha cobrado docenas de muertes", acusó el diputado socialista Andreas Loverdos, para el que esta tragedia es la peor que ha sufrido el país desde la Guerra Civil (1944-1949), con "más de sesenta muertos, una sexta parte de la economía destruida y el futuro de nuestros hijos, hipotecado".

"El Gobierno estaba obligado para con las labores de rescate, y en vez de eso persiguió rescatar su reelección", declaró Loverdos que sin embargo, reconoció que la relación con el resto de partidos no atraviesa su mejor momento, y que admitió que las críticas del Partido Comunista y la Coalición de Izquierda a los dos principales grupos políticos del país puede "tener su impacto en las urnas".