ANKARA/DIYARBAKIR, 31 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado que el atentado perpetrado este jueves en la ciudad de Diyarbakir, que ha dejado al menos siete muertos y más de 20 heridos, se debe a que los terroristas "están arrinconados".
"Esto muestra una vez más la fea cara del terrorismo pero la determinación de nuestras fuerzas de seguridad le pondrá fin", ha dicho en un discurso pronunciado en el Brookings Institute, en el marco de su estancia en Washington para asistir a la cumbre sobre seguridad nuclear.
El ministro de Desarrollo, Cevdet Yilmaz, se ha expresado en la misma línea. "Estamos reconstruyendo Diyarbakir para hacerla más bonita y ellos quieren destruirla", ha afirmado, en alusión al ambicioso plan de restauración puesto en marcha en la zona.
El ataque ha tenido lugar cerca de una estación de autobuses contra un vehículo que llevaba a varios policías de las fuerzas especiales, por lo que la mayoría de las víctimas son agentes, incluidos los siete fallecidos. Además, 27 personas han resultado heridas.
Diyarbakir es una ciudad ubicada en el sureste de Turquía, una región dominada por los kurdos donde actúan los rebeldes del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), considerado una organización terrorista por Ankara.
Las Fuerzas Armadas turcas retomaron el pasado mes de julio la ofensiva contra los insurgentes del PKK, después de dos años de alto el fuego. El Gobierno asegura que en estos ocho meses ha matado a miles de milicianos, mientras que 350 militares y policías han fallecido.
