Erdogan evade la grave crisis política que asola Turquía y se limita a pedir estabilidad

Actualizado: martes, 1 mayo 2007 0:01


ESTAMBUL (TURQUÍA), 30 Abr. (EUROPA PRESS/ Ildefonso González) -

El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, no planteó ayer ninguna solución a la grave crisis política por la que atraviesa el país desde hace una semana y se limitó a pedir unidad para evitar que se vengan abajo los logros económicos conseguidos por su Gobierno durante los últimos cinco años.

"Hace cuatro años y medio este país estaba destrozado por serios problemas, los cuáles gracias a Dios han sido superados uno por uno (...) En este momento, es suficiente con que protejamos el ambiente de estabilidad y de paz, que no dañemos el entorno de confianza en el que hemos trabajado tan duro para conseguirlo", anotó en un discurso a la nación retransmitido esta tarde por las grandes cadenas de televisión.

El primer ministro dio con un palmo de narices a quien esperaba hoy una respuesta del Ejecutivo a la actual situación, sobre todo después de la manifestación que congregó ayer a un millón de personas en el centro de Estambul a favor de los valores seculares de la República y en contra de la candidatura del ministro de Asuntos Exteriores, Abdulá Gül, a la Presidencia de la República.

Así las cosas, todo continuará como hasta ahora, tal y como había anunciado esta mañana el viceprimer ministro, Abdullatif Sener. "El proceso de las elecciones presidenciales continúa tal y como está definido en la Constitución turca. (...) Estamos esperando a la decisión del Tribunal Constitucional", señaló.

A LA ESPERA DEL CONSTITUCIONAL

El Tribunal Constitucional decidirá en las próximas horas si acepta el recurso presentado por el principal partido de la oposición, el socialdemócrata CHP, para que anule la primera votación de las elecciones presidenciales, celebrada el pasado viernes en el Parlamento, en tanto en cuanto no se alcanzó el quórum de diputados (367) que establecen las leyes.

Si la Corte le da la razón al CHP, el Gobierno de Erdogan se vería obligado a convocar elecciones legislativas anticipadas, en principio previstas para principios de noviembre, en un plazo de entre 45 y 90 días. En caso contrario, el aún jefe de la Diplomacia turca previsiblemente sería proclamado como jefe de Estado el próximo 9 de mayo, cuando sólo necesitará una mayoría simple en la cámara para aprobar su nombramiento.

Sea como fuere, la segunda votación tendrá lugar este miércoles, tal y como estaba previsto. Independientemente de lo que fije el Constitucional, la prensa especuló hoy con la posibilidad de que el gubernamental Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) aproveche esta segunda vuelta para que el Parlamento debata adelantar los comicios generales. Las fechas que se barajarían serían el 2 ó el 9 de septiembre, anotó el diario 'Zaman'.

El país se encuentra completamente dividido entre quienes apoyan la gestión del partido islamista moderado AKP y los defensores del secularismo, representados por el todopoderoso Ejército y la oposición. También la población se debate entre ambos polos, como quedó demostrado en la manifestación de ayer en Estambul.

CAÍDA DE LA BOLSA

La situación de crisis política por la que atraviesa Turquía también afectó a los mercados. La Bolsa bajó un 4% al cierre de la sesión, lo que representa la peor caída de los últimos siete meses y la moneda nacional, la lira turca, se depreció un 2,5% con respecto al dólar.

Precisamente, la prensa financiera local alertó hoy de que los mercados responderían a la baja si no se convocaban elecciones legislativas anticipadas, una lectura muy similar a la que había hecho ayer la patronal (Tüsiad). "Es imposible obtener ganancias en Turquía hasta las elecciones (...) Los inversores podrían empezar a abandonar el mercado turco. En este caso, la crisis se haría más profunda aún", valoró el prestigioso diario 'Referans'.

Sin embargo, la presidenta del mayor holding empresarial de Turquía, el Grupo Sabanci, aseguró que "la actual situación de Turquía no está causando ninguna inquietud". "Cuando esta situación temporal concluya, todo estará claro. No hay cambios en los parámetros básicos de Turquía. Nuestra perspectiva de crecimiento para 2007 es del 5%", anotó Güler Sabanci.

REACCIONES DE UE Y EEUU

La Unión Europea (UE), que inició las negociaciones de adhesión con Turquía en octubre de 2005, volvió hoy a valorar la crisis que vive el país candidato. El portavoz de la Comisión Europea, Johannes Laitenberger, reclamó que se respete la independencia del Tribunal Constitucional turco y se eviten "influencias indebidas", en una alusión indirecta al Ejército. Asimismo, destacó la importancia que tiene en la UE el "secularismo democrático".

Por su parte, el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se mostró confiado en que la democracia termine triunfando en Turquía. "Espero que la población turca elegirá a la gente que quiere, para que puedan empezar a trabajar tan pronto finalice este período", declaró desde Nicosia.

En la misma línea se expresó Estados Unidos. "Confiamos en las instituciones democráticas turcas y en que los procesos constitucionales de ese país resolverán cualquier duda que pueda rodear la elección del nuevo presidente turco", apuntó el portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack.

Mientras, el secretario general del Consejo de Europa, Terry Davis, pidió a los militares turcos que "se queden en los cuarteles" y se mantengan al margen de la política, en una clara referencia a su comunicado del pasado viernes en el que recordaban que las Fuerzas Armadas en Turquía constituían "un incondicional defensor del secularismo".