El Estado Islámico captura cuatro aldeas que habían sido retomadas por las milicias rebeldes

Milicianos de las Fuerzas Democráticas de Siria
RODI SAID / REUTERS
Actualizado: lunes, 20 junio 2016 21:56

AMÁN, 20 Jun. (Reuters/EP) -

El grupo terrorista Estado Islámico ha lanzado este lunes un contraataque contra los combatientes de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) cerca de la ciudad de Manbij, el último paso fronterizo entre Siria y Turquía controlado por el grupo terrorista, según ha informado la ONG Human Rights Watch.

La ONG, que trabaja en esa zona, ha advertido que el grupo terrorista ha retomado tres aldeas al sur de la ciudad tras un ataque sorpresa en el que han muerto al menos 28 combatientes de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), respaldadas por Estados Unidos.

"La situación está bajo control. Ellos tienen muchas bajas", ha declarado un portavoz de las FDS, Sharfan Darwish. "Estamos a las puertas. La ciudad entera está rodeada. Tras 20 días de campaña, solo nos queda asaltar la ciudad", ha afirmado. Además, Darwish ha añadido que alrededor de 2.000 personas han logrado escapar de la ciudad.

En estos combates, las FDS están contando con la ayuda de la aviación y fuerzas especiales estadounidenses que apoyan a las FDS. Hasta el momento, las FDS han evitado entrar directamente en la ciudad y se han limitado a asegurar el territorio de alrededor, lo que hace que el contraataque de hoy sea un contratiempo.

OTROS RETROCESOS

El Estado Islámico también ha logrado hacer que el Ejército sirio retroceda en la ciudad de Tabqa, localizada en la provincia de Raqqa, cuando se encontraba a tan solo 10 kilómetros de la ciudad.

Tabqa está a 50 kilómetros de distancia de la ciudad de Raqqa, la capital 'de facto' del autodenominado Estado Islámico, y cuenta con un aeródromo de vital importancia estratégica. En estos ataques el Ejército sirio está respaldado por apoyos rusos.

Al sur de Tabqa se encuentra una explotación petrolera que el Ejército sirio había capturado la semana pasada pero el grupo terrorista ha lanzado ataques suicidas y ha logrado retomarla.

Dos años después de que el Estado Islámico proclamó su califato en los territorios entre Irak y Siria, el grupo terrorista tiene varios frentes abiertos en ambos países y ha estado sufriendo duros golpes y se encuentra en su peor momento desde el 2014.