PARÍS, 3 Sep. (EP/AP) -
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se reunió hoy con el monarca jordano, Abdulá II, en el Palacio del Elíseo, para abordar la manera de revivir el proceso de paz árabe-israelí, en vísperas de la celebración el próximo otoño de una conferencia de paz internacional para Oriente Próximo, auspiciada por Washington.
Sarkozy aseguró que los Ejecutivos de París y Amán comparten "una visión idéntica amplia" y adelantó que ambos mandatarios volverán "a verse otra vez y con frecuencia" por el deseo de ambas naciones de "trabajar codo con codo" en la materia. Se trata de la segunda reunión que el monarca jordano y el presidente francés mantienen desde la victoria de éste en las elecciones presidenciales de la pasada primavera.
Por su parte, el monarca jordano explicó que también trataron la marcha de las relaciones bilaterales, además de la crisis árabe-israelí, la inestabilidad por la que atraviesa Líbano y el futuro de la región de Oriente Próximo en general.
Jordania es partidaria de la celebración de la conferencia internacional que planteó el presidente Estados Unidos, George W. Bush, para revivir el proceso de paz entre palestinos e israelíes, ya que, a su juicio, constituirá una nueva oportunidad para impulsar el diálogo entre las partes en liza y porque, además, está en línea con la iniciativa de paz árabe, impulsada por Arabia Saudí en 2002 y ratificada por la Liga Árabe, es decir, un paz basada en la solución de dos Estados contiguos, palestino e israelí.
Abdulá tiene previsto entrevistarse hoy también con el primer ministro francés, Francois Fillon, tras reunirse ayer con el primer ministro italiano, Romano Prodi, en la capital jordana, Amán, a quien pidió una mayor implicación por parte de los países miembro de la UE para impulsar el proceso de paz árabe-israelí.
REUNIÓN SARKOZY-MANDELA
Por otra parte, el presidente francés se reunió hoy también con el ex presidente sudafricano y símbolo de la lucha contra el apartheid en el país africano Nelson Mandela, y que se encuentra en Francia de visita durante tres días.
Sarkozy recibió en el aeropuerto parisino de Orly al histórico dirigente de 89 años, que padece problemas de movilidad, flanqueado por el ministro de Asuntos Exteriores francés, Bernard Kouchner, y posteriormente le acompañó al hospital de la capital donde se hospedará hasta el próximo jueves, según explicó la oficina de prensa de la Presidencia francesa.
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