MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las delegaciones del Gobierno y la oposición de Venezuela se encuentran ya en la capital de República Dominicana para iniciar un proceso de diálogo que contará, entre otros acompañantes, con el expresidente del Ejecutivo español José Luis Rodríguez Zapatero.
Las partes se han citado durante dos días para analizar una agenda de seis puntos, en un encuentro que llega precedido de no pocos reproches y advertencias. Para aplacar las suspicacias de Gobierno y oposición, cinco países han accedido a asistir a esta cita.
A su llegada, el jefe de la delegación opositora y presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, ha destacado la importancia de explorar nuevas vías para responder a la "situación trágica" que vive el país sudamericano. El diálogo, no obstante, "no excluye otros caminos de lucha", ha advertido en declaraciones a los medios.
La representación chavista está liderada por el ministro de Comunicación, Julio Rodríguez, que en un conciliador mensaje de Twitter ha aplaudido la "colaboración" de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para desarrollar este "diálogo de paz".
La presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente, Delcy Rodríguez, también ha informado de las primeras actividades en redes sociales. "¡Llegamos con el compromiso firme de honrar a nuestros libertadores, proteger a nuestro pueblo y defender a Venezuela! Nada nos detendrá", ha publicado.
El presidente dominicano, Danilo Medina, que ejerce de anfitrión, confía en que "se pueda sacar algo importante para el pueblo de Venezuela" de las conversaciones que han arrancado este viernes y en las que Chile, México y Paraguay figuran como observadores.
El ministro de Exteriores de México, Luis Videgaray, ha difundido en Twitter una imagen de los primeros compases de la cita y ha explicado que su país acompaña el proceso "de manera constructiva y con pleno respeto a la autodeterminación del pueblo de Venezuela".
