SOFIA, 24 Oct. (Reuters/EP) -
El primer ministro búlgaro, Plamen Oresharski, ha asegurado este jueves que su Ejecutivo se replanteará la decisión adoptada por el Parlamento de ampliar hasta 2020 la prohibición a los extranjeros de comprar terrenos cultivables en el país, una decisión que la Unión Europea advirtió que podría llevar a revisar su tratado de adhesión.
"La decisión fue resultado de la emoción política, no fue racional. Encontraremos la manera de revisarla", ha afirmado Oresharski en un comunicado desde Bruselas, donde está previsto que se reúna el viernes con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. "Obviamente ahora discutiremos la moratoria", ha recalcado.
El Parlamento búlgaro acordó el martes extender la prohibición hasta 2020 al considerar que los precios de sus terrenos cultivables son todavía muy inferiores a los de los estados más ricos, por lo que el aumento de la demanda externa dañaría la capacidad de los agricultores nacionales para obtener propiedades.
Sin embargo, según el acuerdo de adhesión con el que Bulgaria pasó a formar parte de la Unión Europea en 2007, la prohibición debería finalizar el próximo 1 de enero. En la actualidad los extranjeros no pueden adquirir parcelas en el país si no es a través de una compañía búlgara registrada. Si finalmente se rompiese el pacto el Eurogrupo podría llevar a un procedimiento de infracción.
