Un grupo de soldados secuestra al primer ministro

LISBOA, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro de Guinea-Bissau, Carlos Gomes Junior, ha sido secuestrado este jueves por un grupo de soldados y ha sido trasladado a la fuerza a la sede de su Gobierno en la capital del país, Bissau, donde se está reuniendo con altos responsables del país, según informaron fuentes diplomáticas y gubernamentales a la agencia de noticias portuguesa Lusa.

Según la agencia portuguesa, Gomes Junior fue secuestrado junto al jefe de las Fuerzas Armadas, Zamora Induta. El primer ministro ha sido trasladado al Palacio de Gobierno, donde está reunido en estos momentos con altos responsables del país en presencia de algunos miembros del Ejecutivo.

Los soldados entraron en las oficinas de Carlos Gomes Junior y lo detuvieron, según indicaron fuentes presenciales a Reuters. Fuentes diplomáticas occidentales indicaron a la agencia que el incidente no ha afectado, en principio, al presidente del país, Malam Bacai Sanha.

En un primer momento, según la agencia de noticias pan-africana APA, los militares liberaron 'manu militari' al ex jefe de la Armada, el contraalmirante José Américo Bubo Na Tchute, acusado de intento de golpe de Estado y quien se encontraba refugiado en las oficinas de la ONU. Después de liberar a Bubo Na Tchute, los soldados se dirigieron a la sede del primer ministro y se apoderaron de Carlos Gomes Junior.

El contraalmirante Bubo Na Tchute, acusado de intentar un golpe de Estado en agosto de 2008, se refugió clandestinamente en las locales de la ONU el pasado 28 de diciembre después de regresar a su país procedente de Gambia. Desde la sede de la Oficina de la ONU en Guinea-Bissau (UNOGBIS) anunció que su intención era solucionar su caso de forma "pacífica y legal".

El pasado mes de enero, el Gobierno reclamó al secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, la entrega de Bubo Na Tchute. Tras la declaración efectuada desde la UNOGBIS, el Ejecutivo endureció su tono y exigió su entrega "inmediata" e "incondicional". Las autoridades habían puesto en marcha una comisión de investigación para establecer cómo había podido regresar clandestinamente a Bissau el ex jefe de la Armada.