Vehículo dañado en la ciudad ucraniana de Mariúpol - V Ictor / Xinhua News / ContactoPhoto
Así, ha hecho hincapié en que "el secretario general Guterres y otros líderes internacionales deberían presionar a los altos funcionarios rusos para que garanticen un paso seguro hacia el territorio controlado por Ucrania".
El organismo ha entrevistado a 56 personas que escaparon de Mariúpol entre mediados de marzo y mediados de abril. "Describieron las terribles condiciones de la ciudad, y los que salieron más recientemente se vieron obligados a ir a Rusia o al territorio controlado por Rusia, a menos que tuvieran los medios financieros y pudieran organizar el transporte privado a través de las peligrosas rutas de escape", ha asegurado HRW.
Tras un asedio que comenzó alrededor del 2 de marzo de 2022, las fuerzas rusas ocupan ahora casi toda la ciudad Mariúpol, excepto el último reducto de las fuerzas ucranianas en la planta siderúrgica de Azovstal, donde, según las autoridades ucranianas, permanecen unos cuantos miles de soldados ucranianos, unos 500 de ellos heridos, y mil civiles.
HRW también ha denunciado que se desconoce el número total de civiles muertos en Mariúpol. Las autoridades ucranianas calculan que pueden haber muerto allí 20.000 personas desde que comenzó la guerra.
Guterres tiene previsto reunirse este mismo martes con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, para abordara el conflicto. Posteriormente, tiene en su agenda desplazarse el jueves a Ucrania para un encuentro con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.