Inteligencia dice que no pudo actuar con mayor rapidez contra Mohamed Merah

Actualizado: viernes, 23 marzo 2012 16:22


PARÍS, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

Bernard Squarcini, director central del servicio de inteligencia interior de Francia, ha explicado que el departamento que encabeza, la DCRI, no pudo actuar con mayor rapidez para evitar que Mohamed Merah asesinase a siete personas en tres ataques distintos este mes de marzo en Tolouse y Montauban.

"Han muerto varias personas, entre ellas varios niños, de una manera particularmente cruel, y nos preguntamos" si "podríamos haber actuado de otra manera", ha declarado en una entrevista con el diario 'Le Monde' publicada este viernes, un día después de que Merah muriera durante una operación policial en la vivienda de Toulouse donde se encontraba atrincherado desde hacía más de 30 horas.

"Pero el domingo por la tarde", cuando Merah había matado ya a tres militares en dos momentos distintos e iba a asesinar a un profesor y a tres niños frente a un colegio judío al día siguiente, "era imposible decir: 'Es Merah, hay que atraparlo'", según Squarcini, que ha añadido que en aquel momento el asesino ni siquiera había previsto perpetrar el ataque del lunes, como reveló él mismo después.

El jefe de la DCRI ha dicho que aunque ha habido "víctimas inocentes, podrían haber sido más". "No pudimos actuar más rápidamente; nos habría gustado", ha añadido.

TENÍA "DOS CARAS"

Mohamed Merah, un joven francés de origen argelino, ha sido descrito por Squarcini como una persona que tenía "dos caras" y por eso no levantó sospechas antes, porque en distintas ocasiones en que trató con los servicios de inteligencia franceses en los últimos años demostró "una excelente cooperación y educación".

Si bien es cierto que viajó a Afganistán, a Pakistán y a varios países de Oriente Próximo, consiguió no aparecer "en los radares" del servicio de inteligencia exterior francés, que tampoco fueron alertados por los de otros países como Estados Unidos, según el director de la DCRI.

Mientras estuvo atrincherado en el edificio de Toulouse donde finalmente murió por un disparo de un policía, Merah confesó a los agentes que cuando viajó a Pakistán estuvo en la región de Waziristán y que allí recibió entrenamiento terrorista.

A la pregunta de por qué el joven figuraba en la lista de exclusión aérea de Estados Unidos y en la lista del FBI de personas vinculadas con Al Qaeda, Squarcini ha respondido que, "probablemente, porque fue registrado en un control en Kandahar" (Afganistán).

La DCRI empezó a intercambiar información con la Policía Judicial francesa el viernes pasado, un día después del segundo ataque de Merah, en el que mató a dos militares. "En aquel momento, nos planteábamos que pudiera ser la ultraderecha, la 'yihad' (guerra santa musulmana) o un loco", ha indicado.

Tras los asesinatos junto al colegio judío, "por la forma en la que atacó, vuelve a ganar peso la hipótesis yihadista", pero no se descarta la de la "ultraderecha", ha agregado. En cualquier caso, la "trayectoria criminal" de Merah era "extraña", en opinión de Squarcini, que ha recordado que "no hubo ninguna reivindicación" y los distintos asesinatos solo tenían "una conexión geográfica".

CASO "ATÍPICO"

A su juicio, el caso de Merah es "atípico", porque "es una persona que durante su infancia tenía un comportamiento violento pero no se puede relacionar con ninguna tipología". "Es evidente que puede haber otros solitarios como él, así lo creen todos los servicios de inteligencia, pero eso no cambia en lo fundamental nuestra forma de entender el fenómeno terrorista", ha señalado.

Squarcini ha afirmado que, "para hacer lo que hizo", el joven tenía que tener "problemas psiquiátricos" y de "fanatismo", no solo una "trayectoria yihadista". Cuando la DCRI lo investigó tras su primer viaje a Afganistán, no detectó "activismo ideológico" ni que frecuentase la mezquita, según su director.