Irak.- Asciende a 142 el balance de muertos en distintos atentados en Irak

Actualizado: jueves, 2 agosto 2007 2:10

La Oficina de Al Maliki lamenta la marcha del Ejecutivo de los ministros afines al mayor bloque parlamentario suní

BAGDAD, 2 Ago. (EP/AP) -

Al menos 142 personas han fallecido hoy en Irak, incluidos 70 en tres atentados con bomba en distintos puntos de la capital iraquí, mientras que el Ejército estadounidense informó del hallazgo de 17 cadáveres en una fosa común en la provincia de Diyala, al noreste de Bagdad, entre ellos mujeres, menores y ancianos y en su mayoría, suníes, a manos, según el Ejército, de milicianos de Al Qaeda.

El balance de víctimas mortales en el atentado contra un tanque de combustible de una gasolinera situada en el oeste de Bagdad ha aumentado a 50, mientras que ya son más de 60 las personas heridas, según informaron fuentes de la Policía iraquí.

La deflagración ocurrió en torno a las dos de la tarde (doce del mediodía en España) en el barrio de Mansour, de mayoría suní. Varios agentes de Policía atribuyeron la explosión a un ataque suicida.

Previamente, la detonación de un coche aparcado y cargado de explosivos se cobró la vida de otros 17 civiles en una concurrida plaza bagdadí, donde un gran cráter puso de relieve la importante carga explosiva empleada en el atentado, según explicaron fuentes policiales que cifraron en 32 las personas heridas en la deflagración.

Los explosivos, según constató un agente de Policía, fueron colocados en un vehículo aparcado en la plaza Al Hurriya en el vecindario de mayoría chií de Karrada y detonó alrededor de las 10:15 hora local según precisó dicha fuente.

En el ataque, varios microbuses y seis vehículos más fueron afectados por las llamas, así como también sufrieron daños materiales una gasolinera cercana al lugar de la explosión y una popular tienda de helados que estaba cerrada en el momento de la deflagración.

Fuentes policiales iraquíes confirmaron hoy también la muerte de tres personas por la explosión de un coche bomba estacionado en el sur de la capital en la que resultaron heridas otras cinco personas en el barrio de mayoría cristiana de Dora, en Al Athouriyn.

Por otra parte, cuatro soldados estadounidenses murieron en el este de Bagdad, tres de ellos por la explosión de una potente bomba, según informó hoy el Ejército norteamericano.

Tres soldados murieron y otros seis resultaron heridos por la explosión de una sofisticada bomba conocida como EFP cerca de su patrulla durante operaciones de combate ayer, según el comunicado del Ejército. Otro soldado falleció por disparos de armas ligeras también ayer en un incidente aislado, según la misma fuente. Dichas bajas elevan a 76 la cifra total de víctimas mortales en el mes de julio en el seno del Ejército norteamericano, la más baja en ocho meses consecutivos.

Las fuerzas estadounidenses han matado a tres presuntos insurgentes y detenido a otros 29 en varias redadas realizadas en distintas partes de Irak ayer y hoy, según informó el Ejército en un comunicado. El alto mando militar estadounidense explicó que el objetivo de los registros eran los líderes de la banda Al Qaeda en Irak en el centro y el norte del país.

Asimismo, un soldado británico murió anoche por la explosión de una bomba colocada en una carretera al paso del vehículo blindado en el que viajaba por Basora, en el sur de Irak, según informó hoy el Ministerio británico de Defensa.

El comunicado indica que el militar pertenecía al Segundo Regimiento de Tanques y que aunque salió del lugar del atentado con heridas, murió poco después por la gravedad de las mismas.

El destacamento de Reino Unido en Irak incluye a un total de 5.500 tropas, la mayoría desplegada en los límites de Basora. El balance actual de soldados británicos muertos desde la invasión de marzo 2003 se eleva a 164.

EL EJECUTIVO LAMENTA LA MARCHA DE SUNÍES

Respecto a la salida del Ejecutivo iraquí de los ministros afines al Frente para el Acuerdo Iraquí, el principal bloque suní en el Parlamento, la oficina del primer ministro, Nuri al Maliki, lamentó su marcha y aseguró estar abierta a un diálogo con la coalición suní y otros partidos, aunque no se pronunció sobre el malestar del Frente por no atender el Ejecutivo sus demandas.

"Nuestro objetivo siempre ha sido la continuidad de la participación política activa y que todo el mundo arrime el hombre en sus responsabilidades de gobernar el país y en la toma de decisiones", aseguró el Gobierno en un comunicado. "Permaneceremos en contacto con todos los bloques, incluido el Frente para el Acuerdo (Iraquí)", añade el texto.

Desde Washington, el secretario de prensa de la Casa Blanca, Tony Snow, admitió la importancia de que todas las facciones políticas participen en la escena política y en los esfuerzos de reconciliación nacional y admitió que Estados Unidos "está pendiente de la situación", si bien emplazó a no pensar que la salida de los suníes "supone una retirada absoluta del proceso político".

Previamente, el líder de dicha coalición, Adnan al Dulaimi, confirmó que "la salida del Gobierno no significa que abandonemos todo el proceso político". "Continuaremos nuestra participación a través del Parlamento y contactaremos con otros bloques parlamentarios para alcanzar nuestras demandas", explicó a la agencia AP.

En rueda de prensa, uno de los líderes del bloque suní Rafaa al Issawi explicó desde Bagdad la intención de los seis ministros afines al bloque de presentar esta tarde sus actas de dimisión por lo que calificó de falta de respuesta por parte de Al Maliki a una serie de exigencias que presentó hace una semana el Frente para el Acuerdo Iraquí y tras expirar el plazo de siete días que dicha coalición impuso como ultimátum al Gobierno para cumplir sus demandas. "El Frente para el Acuerdo Iraquí anuncia su salida del Gobierno de Nuri al Maliki", informó.

Entre estas peticiones se encuentran la de liberar a todos los agentes de seguridad que no han sido imputados ni condenados por delitos específicos, el desmantelamiento de las milicias --incluidas las chiíes-- y la participación de todos los grupos representados en el Gobierno en materia de cuestiones de seguridad.

"El Gobierno continúa con su arrogancia rechazando cambiar su postura y ha cerrado de un portazo la puerta a cualquier reforma significativa necesaria para salvar a Irak", lamentó Al Issawi, que admitió asimismo su convicción de que "el Gobierno respondería a estas demandas o al menos admitiera el fracaso de sus políticas que han llevado a Irak al mayor nivel de miseria nunca antes vista en su historia reciente", si bien reconoció que dicha actitud de no atender sus exigencias no les ha "sorprendido".

El Frente para el Acuerdo cuenta con 44 escaños parlamentarios de un total de 275 y su salida del Ejecutivo podría acarrear la desestabilización del mismo y sus pretensiones de "unidad nacional" entre las confesiones así como reducir su legitimidad ante los iraquíes. A su marcha se suma la que protagonizaron el pasado abril los cinco ministros leales al clérigo disidente chií Muqtada al Sadr después de que Al Maliki se negara a presentar un calendario de retirada de las tropas extranjeras en Irak.