BAGDAD, 30 Abr. (EP/AP) -
El teniente coronel William H. Steele se enfrenta desde hoy una posible condena a la pena capital por delitos como ayuda al enemigo, entrega de teléfonos móviles no controlados a detenidos, fraternización con la hija de un detenido, relaciones inapropiadas con un intérprete, posesión de vídeos pornográficos, faltar a una orden y negligencia en la gestión de dinero público presuntamente cometidos durante su estancia en Irak. Mientras, sus abogados denuncian que no tienen acceso a pruebas consideradas alto secreto que probablemente serán utilizadas en el juicio.
Steele, un reservista de Virginia, cumplió el periodo completo de estancia en Irak, en la prisión de Camp Cropper, emplazada cerca del Aeropuerto Internacional de Bagdad. En esta cárcel es donde estuvo detenido Sadam Huseín antes de su ejecución en la horca.
El jefe del equipo de abogados de Steele, el mayor David G. Barrett, se quejó durante la sesión de apertura del juicio de que les hubieran negado el acceso a pruebas contra su cliente clasificadas como alto secreto. "¿Cómo podemos preparar la defensa y las declaraciones de los testigos en este caso de pena capital sin conocer estas pruebas?", afirmó Barrett.
Estas declaraciones han sido de las pocas que han trascendido, ya que la prensa no tenía permiso para asistir a la audiencia salvo en momentos muy concretos.
El juicio se celebra en las instalaciones de Camp Victory, la base militar estadounidense situada en las inmediaciones del aeropuerto, al oeste de Bagdad.
