Irak.- Al Maliki hace un llamamiento para luchar con "puño de hierro" contra las "conspiraciones" extranjeras

Actualizado: miércoles, 6 junio 2007 20:04

BAGDAD, 6 Jun. (EP/AP) -

El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, hizo hoy un llamamiento a los jefes militares para que luchen con "puño de hierro" contra las "conspiraciones" de capitales extranjeras, contra aquellos que extenderían "la alfombra roja" ante una injerencia externa en Irak, en clara referencia al vicepresidente suní, Tariq al Hashemi.

En un duro discurso ante los comandantes del Ejército iraquí, Al Maliki no especificó, sin embargo, qué iraquíes o extranjeros podrían estar planeando expulsarle del poder, pero su liderazgo ha sido criticado tando dentro como fuera del país, inclusive en el Congreso estadounidense.

Se cree que el ex primer ministro iraquí Ayad Alaui, miembro del Parlamento y chií laico, está reuniendo apoyos políticos para intentar reemplazar a Al Maliki, ya que opina que éste apoya al sectarismo chií.

Al parecer, Alaui tiene el apoyo de Egipto, cuyos líderes, como en otros países árabes predominantemente suníes, han expresado su preocupación por el incremento del poder político de los chiíes en Irak.

"No habrá ninguna opción para las conspiraciones en este u otros países árabes. Me quedo atónito cuando oigo a algunos políticos bajo la sombra de la democracia hablando francamente y diciendo que no tiene nada de malo la intervención en Irak de los países árabes e islámicos", señaló el primer ministro.

Contrario a estas declaraciones, el vicepresidente suní de Irak, Tariq al Hashemi, pidió horas antes a los líderes árabes de la región que no permitan que el futuro de su país se decida por los no árabes, en una clara referencia a Irán y Estados Unidos.

"No debería dejarse que el futuro de Irak fuera definido por extranjeros. Debería haber una posición árabe antes de que sea demasiado tarde", consideró Al Hashemi en la capital egipcia, donde se entrevistó con el presidente de este país, Hosni Mubarak, y con el secretario general de la Liga Árabe, Amr Musa.

Sus comentarios reflejan el temor suní, por un lado, a un Irak dominado por la mayoría chií, que cuenta con el apoyo de Estados Unidos, en los que los suníes permanezcan totalmente al margen, y, por otro, a una creciente influencia de Irán, de mayoría chií, en los chiíes de Irak.