BAGDAD, 30 Nov. (EP/AP) -
El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, pidió hoy a los diputados y ministros próximos al clérigo chií Muqtada al-Sadr que pongan fin a su boicot a las instituciones, declarado ayer en protesta por su encuentro con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
En rueda de prensa celebrada en Bagdad a su vuelta de Amán --donde se reunió con Bush y con el Rey de Jordania, Abdalá II--, Maliki: declaró: "Espero que reconsideren su decisión, porque no constituye un paso positivo en el proceso político".
Los partidarios de Al Sadr, que cuentan con 30 diputados y cinco ministros, anunciaron ayer su boicot en protesta por la reunión con Bush, que consideraron "una provocación a los sentimientos de los iraquíes y una violación de sus derechos constitucionales". Aparte, hoy presentaron dos condiciones para poner fin a su protesta: la mejora de la seguridad en el país y el aumento del suministro de electricidad, gas y otros servicios básicos a la población.
