MADRID, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro británico de Exteriores, David Miliband, insistió hoy en que Reino Unido toma sus decisiones respecto a la retirada de sus tropas en las zonas que controla en base a la situación que hay en ellas "y no a lo que ocurre en Bagdad", controlada principalmente por las tropas estadounidenses.
"Las decisiones británicas sobre Basora se basan en la situación allí y no en Bagdad", afirmó rotundo al ser preguntado durante un desayuno organizado por el Real Instituto Elcano sobre la decisión de Londres de retirarse esta semana del Palacio de Basora, en el centro de esta ciudad, la segunda más importante del país y que está bajo control de las tropas británicas.
Según Miliband, Reino Unido considera que "Irak debe ser gobernado por los iraquíes", de ahí el que las tropas británicas ya hayan cedido el control de tres de las cuatro provincias que controlaban en el sur del país. "A medida que mejora su capacidad deben ir asumiendo el control", subrayó, precisando que Reino Unido seguirá estando presente "a nivel militar pero también económico".
El ministro admitió que la invasión de Irak creó "una gran división en la sociedad británica" pero insistió en que lo importante ahora es "pensar en los próximos cinco años y no en los cinco años pasados".
Respecto a Oriente Próximo, afirmó que "es difícil concebir la estabilidad global sin la estabilidad" en esta región. Por ello, consideró fundamental el que se "mantenga la determinación de que la única solución es tener dos Estados" y previno de que "cuanto más tiempo pase más difícil será llegar a esta solución".
"La oportunidad que tenemos ahora hay que aprovecharla", añadió, instando a "colaborar con los que quieren una coexistencia pacífica". En este sentido, abogó por respaldar al presidente palestino, Mahmud Abbas, "un hombre de gran integridad", y alabó al ministro de Exteriores español, Miguel Angel Moratinos, de quien dijo es "una voz de moderación y sentido común en la materia".
