Irak.- Al Sadr llama a sus simpatizantes a la calle contra la construcción del muro en un enclave suní en Bagdad

Actualizado: miércoles, 25 abril 2007 20:30

BAGDAD, 25 Abr. (EP/AP) -

El clérigo disidente chií Muqtada al Sadr, al frente de la milicia el Ejército del Mahdi, condenó hoy la construcción del muro de 12 metros de altura a lo largo de cinco kilómetros en torno al enclave suní en Bagdad de Azamiyah, e hizo un llamamiento a sus simpatizantes para salir a la calle a protestar por lo que califica de signo de la "voluntad maligna" de los estadounidenses "ocupantes", en referencia al muro.

En un comunicado, Al Sadr asegura que las protestas de la comunidad suní contra la construcción del muro muestran que los iraquíes rechazan "el muro sectario, racista e injusto que busca dividir" a la población iraquí. "Estoy convencido de que esas voces honorables tirarán abajo el muro", aseguró.

"Este muro muestra la voluntad maligna del ocupante y sus proyectos sectarios y terroristas contra nuestra población", denunció el clérigo chií. "Nosotros, la población de Irak defenderemos Azamiyah y otros barrios que vosotros (estadounidenses) queréis segregar de nosotros. Permaneceremos hombro con hombro con vosotros (suníes) para manifestarnos y proteger nuestra tierra santa", añadió.

Las declaraciones, leídas por un asesor suyo a partir de un comunicado del clérigo, son las primeras hechas públicas desde que la semana pasada el Ejército estadounidense anunciara la construcción de un muro de hormigón rodeando la ciudad de Azamiya, de mayoría suní, y que ha sido diana frecuente de ataques con mortero y cohetes por parte de milicias chiíes.

Otro asesor de Al Sadr, Sheik Salah al Obaidi confirmó desde la ciudad santa de Nayaf la convocatoria de dos manifestaciones en el este y oeste de Bagdad para condenar el levantamiento del muro, si bien no especificó cuándo se celebrarán. Sí incidió en que, si la seguridad lo permite, los seguidores de Al Sadr estarían dispuestos a sumarse a los manifestantes en Azamiyah, al tiempo que incidió en que la desaparición del propio Al Sadr "es por motivos de seguridad", y a su juicio declaró que "no es necesario saber donde está". "Sayyed Muqtada está con la población y siente su sufrimiento", agregó.

Mientras que la comunidad suní ampliamente rechaza la construcción del muro, Estados Unidos alega que responde a motivos de seguridad, y justifica su argumento en los ataques por parte de los 'escuadrones de la muerte' contra la población suní. Por su parte, el primer ministro, Nuri al Maliki, aseguró el pasado domingo que no permitiría su construcción, aunque sí dijo estar dispuesto a estudiar otro tipo de mecanismo de separación, según matizaron más tarde fuentes militares cercanas a Al Maliki.

Por su parte, un importante grupo suní denunció hoy que el Ejecutivo haga la vista gorda a los ataques de índole interconfesional perpetrados por las milicias chiíes, y especialmente el Ejército del Mahdi.

"La vuelta de las milicias y escuadrones de la muerte para atentar contra zonas suníes, los intentos de encadenar estas zonas con muros para hacerlas objetivos más fáciles para las milicias, y las campañas de arresto contra suníes, especialmente imanes de mezquitas, son todos parte de un plan para vaciar Bagdad de suníes", denunció la Conferencia del Pueblo de Irak, dirigido por el político suní Adnan al Dulaimi en un comunicado, instando al Gobierno a acabar con sus "proyectos sectarios".