MADRID 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
Tres funcionarios de prisiones iraníes han sido acusados de asesinar a tres opositores que fallecieron en prisión por los golpes recibidos bajo arresto en el periodo que siguió a las controvertidas elecciones presidenciales que tuvieron lugar el pasado junio en Irán, publicaron el sábado medios locales.
Un tribunal militar iraní anunció que en torno a dos docenas de funcionarios de la cárcel de Kahrizak, situada en Teherán, también están acusados de maltratos a los opositores detenidos. De ellos, existen evidencias para procesar a 12, según la agencia de noticias semioficial Fars.
Se acusa de asesinato premeditado a tres funcionarios de prisiones por participar en las palizas, aunque otros nueve afrontan cargos que no han trascendido. Tampoco se sabe nada de la identidad de los acusados.
En un primer momento los funcionarios de la prisión de Kahrizak afirmaron que la causa de la muerte de los tres opositores había sido la meningitis. Sin embargo, el juez que instruye el caso considera que estas tres personas fueron golpeadas hasta la muerte por parte de personal de la prisión. El juez también achaca la muerte de los opositores a una actuación negligente por parte de los servicios sanitarios de la prisión.
Tras las elecciones de junio de 2009, sobre las que recayeron sospechas de fraude masivo por parte de las autoridades para que ganara el presidente en el poder, Mahmud Ahmadineyad, se produjeron masivas protestas populares. En torno a 4.000 opositores fueron encarcelados, y de ellos 72 murieron durante su arresto, según afirmó la página web reformista Norooz en septiembre.