JERUSALÉN 13 Sep. (EUROPA PRESS) - El presidente estadounidense, George W. Bush, advirtió hace un año a Corea del Norte para que se abstuviera de suministrar material y tecnología nuclear a países como Siria e Irán, además de a organizaciones terroristas, según reconoció hoy el ex embajador de Estados Unidos ante la ONU, John Bolton y recordó que tal suministro sería percibido por Washington "como una amenaza peligrosa".
En una entrevista telefónica con el diario israelí 'Haaretz', Bolton incidió en la posibilidad de que el Ejecutivo de Pyongynag esté utilizando a Siria e Irán como "lugares seguros" para continuar con su propia actividad nuclear, lo que contravendría el acuerdo suscrito en el marco de las negociaciones a seis bandas para la desnuclearización de Corea del Norte el pasado febrero en Beijing.
Según el citado diario, una fuente oficial estadounidense explicó que Damasco puede estar construyendo una instalación nuclear con la ayuda de Corea del Norte, una semana después de que Siria denunciara la violación de su espacio aéreo por parte de aeronaves de combate israelíes que, además, lanzaron munición en el noroeste de su territorio.
Por su parte, el rotativo 'Washington Post', citando sin nombrarla otra fuente oficial estadounidense, reconoció que imágenes de satélite de los últimos seis meses indicaban, según fuentes iraelíes, que Siria podía estar construyendo dicha instalación nuclear.
Según explicó el diario neoyorquino 'New York Times', fuentes oficiales de Washington explicaron que los objetivos de las incursiones israelíes podrían ser descubrir dichos arsenales que el Ejecutivo de Tel Aviv cree han sido suministrados por Irán al denominado Partido de Dios --la milicia chií libanesa Hezbolá-- a través de territorio sirio, algo que ayer rechazó el embajador sirio ante la ONU, Bashar al Jafari.
Una fuente de la Administración estadounidense reconoció que Israel, recientemente, ha fletado vuelos de reconocimiento sobre suelo sirio para tomar fotografías de posibles instalaciones nucleares sirias, establecidas, según Israel, a partir de material proporcionado por Corea del Norte.
"Los israelíes creen que Corea del Norte está vendiendo a Irán y Siria lo poco que les queda", reconoció dicha fuente, aunque no pudo confirmar si el ataque israelí logró recabar pruebas que sostengan esta tesis.