La renuncia se produce el día antes del consejo de administración, que previsiblemente debería aprobar un aumento de capital
ROMA, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los títulos de Alitalia registran hoy la mayor caída de la Bolsa de Milán, con un retroceso del 3,82% hasta los 0,8535 euros, tras la repentina dimisión ayer por la noche del presidente de la aerolínea de bandera italiana, Berardino Libonati, así como después de que la compañía hiciera público su endeudamiento neto a finales de junio, que asciende a 1.034 millones de euros.
El Ministerio de Economía italiano, después de aceptar la dimisión de Libonati tanto del consejo de administración como del cargo de presidente de la aerolínea, ha propuesto el nombramiento de Maurizio Prato con las mismas funciones.
El Ministerio apuntó la importante experiencia en la gestión empresarial de Prato, incluso en empresas del sector del transporte aéreo, así como en procesos de reestructuración y privatización de compañías.
Por otro lado, el Ejecutivo italiano recalcó su intención de ceder el control de la aerolínea y confió en que la nueva directiva de Alitalia se encargue de encontrar "rápidamente" sujetos industriales y financieros dispuestos no sólo a comprar, sino también a proveer el saneamiento, el desarrollo y el relanzamiento de Alitalia.
A este respecto, el Ministerio de Economía aseguró que que valorará con "plena disponibilidad" las modalidades técnicas de cesión de control que la aerolínea de bandera italiana propondrá a sus accionistas.
Libonati motivó su dimisión al hecho de que había aceptado el encargo en estrecha relación con la venta iniciada por el Estado, por lo que el cierre del proceso de privatización y la consiguiente aparición de nuevas perspectivas para la aerolínea, que tiene que aportar nuevas soluciones más "operativas", han motivado su renuncia. El ex presidente recalcó que la aerolínea necesita alguien con mayor experiencia en la gestión de empresas y con más conocimiento del sector.
La renuncia se produjo el día antes de la reunión del consejo de administración, prevista para hoy, que probablemente debería aprobar un aumento de capital y discutir las bases de un plan industrial. Éste supondrá un recorte en las rutas menos rentables y un aumento de las conexiones europeos desde los aeropuertos menores.
