MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, ha confirmado oficialmente este martes al ultraconservador Ebrahim Raisi como presidente electo de Irán, dos días antes de que jure el cargo en una ceremonia en el Parlamento.
Jamenei ha encabezado una ceremonia en la que también han estado presentes el presidente saliente, Hasán Rohani, y el ministro del Interior, Abdolreza Rahmani Fazli, quien ha presentado un informe sobre las últimas presidenciales, en las que Raisi se obtuvo de forma aplastante.
El líder supremo ha subrayado que "la estimada nación ha mostrado la autoridad de su voto sobre los asuntos del país a través de su presencia significativa y honorable en unas circunstancias difíciles y complejas", en referencia a las elecciones, marcadas por la baja participación.
Así, ha descrito a Raisi como una persona "distinguida", "de gran piedad y sabiduría" y con un historial "brillante", antes de resaltar que su elección como presidente destaca que la población "ha mostrado su firme determinación de continuar en el iluminado camino de la Revolución (Islámica)".
"Nuestro querido país está sediento de servicios importantes y preparado para dar un salto en todas las áreas", ha dicho, antes de abogar por una gestión "valiente y competente" que "pueda organizar las capacidades manifiestas y ocultas de la nación, en particular las de los jóvenes".
Por ello, Jamenei ha reclamado "eliminar los obstáculos en la producción y continuar políticas para fortalecer la moneda nacional y empoderar a las clases medias y bajas, que están soportando la carga de los problemas económicos", según ha recogido la agencia iraní de noticias Mehr.
Jemenei, que ha dado las gracias a la población por participar en las elecciones, ha hecho hincapié en que esta ceremonia pública para mostrar su apoyo al presidente electo "es una manifestación de un traspaso de poderes de forma racional".
"En muchos países, el traspaso de poderes se lleva a cabo a menudo a través de la lucha. En Irán, el traspaso de poderes es realizado en paz y seguridad en distintos periodos, lo que es un signo de racionalidad, paz y confianza pública en el país, los funcionarios y la población, así como un signo de diversidad política", ha defendido.
Por otra parte, ha valorado como positiva la tasa de participación en los comicios y ha resaltado que "la conspiración para boicotear las elecciones fue planificada en los círculos políticos de los enemigos de Irán y algunos de ellos lo intentaron en el país (...), pero la población ha respondido de forma decisiva".
"Nuestros enemigos están hoy más activos en la guerra blanda y en la guerra de medios para dominar la opinión pública, para lo que gastan enormes cantidades de dinero y trabajan mucho. Buscan hacerse con la opinión pública para hacer avanzar sus planes", ha argumentado, antes de apostar por lograr que las medidas en este campo por parte de Teherán "sean más firmes y más inteligentes".
Tras ello, Raisi ha hecho hincapié en que "el mensaje del pueblo en las elecciones del 18 de junio fue un mensaje de cambio, justicia, lucha contra la corrupción, la discriminación y la justicia y de la necesidad de solucionar los problemas económicos sociales y culturales en la sociedad".
"La nación iraní quiere que el nuevo Gobierno lleve a cabo grandes cambios y el Gobierno tiene grandes planes en este sentido", ha manifestado, antes de recalcar que intentará lograr la retirada de las sanciones impuestas por Washington contra el país después de que el país norteamericano se retirara en 2018 del acuerdo nuclear firmado en 2015.
En este sentido, Rohani ha apuntado en su última entrevista televisada antes de dejar el cargo que "es posible lograr un acuerdo" para la vuelta al cumplimiento de las cláusulas del acuerdo nuclear y ha reiterado que si se retiran las sanciones, Teherán volverá a aplicar todos sus compromisos.
Rohani ha explicado que la resolución aprobada hace unos meses por el Parlamento para seguir haciendo avanzar el programa nuclear "es un obstáculo" y ha agregado que también lo será para la próxima Administración, si bien ha manifestado que lo principal es que Estados Unidos retire sus sanciones.