TOKIO, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El fabricante japonés de automóviles Mitsubishi Motors cerró su primer semestre fiscal, comprendido entre los meses de abril y septiembre, con unas pérdidas netas de 5.600 millones de yenes (34 millones de euros al cambio actual), lo que supone reducir en un 65,2% los 'números rojos' contabilizados en el mismo período del ejercicio anterior.
Mitsubishi explicó que la positiva evolución de los resultados se explica en parte por la debilidad del yen, así como por la aportación de los resultados extraordinarios, por el crecimiento de sus ventas y por una mayor rentabilidad por unidad comercializada.
La cifra de negocio de la multinacional nipona se situó en 1,31 billones de yenes (7.950 millones de euros) entre los pasados meses de abril y septiembre, lo que se traduce en una progresión de más del 30% en comparación con el mismo período del ejercicio precedente.
La compañía japonesa vendió en todo el mundo 690.000 vehículos en el primer semestre de su actual ejercicio fiscal, con un crecimiento del 15%. En Europa, el aumento de las entregas alcanzó el 18%, con 167.000 unidades, gracias a la expansión en Rusia, en Ucrania y en otros países del Este.
Mitsubishi ha revisado al alza sus previsiones para el año fiscal 2007-2008, que concluirá el próximo 30 de marzo, período en el que espera que sus ventas mundiales se eleven a 1,36 millones de unidades, 39.000 más de las previstas inicialmente.
Además, su cifra de negocio alcanzará 2,7 billones de yenes (16.350 millones de euros), con un alza del 11% sobre la anterior estimación. Por contra, el objetivo de beneficio neto se mantiene en 20.000 millones de yenes (121 millones de euros) por la mayor carga fiscal.
