BRUSELAS 12 Mar. (EP/AP) -
La Unión Europea está muy avanzada en la planificación de su misión para sustituir a la actual administración de la ONU en la provincia serbia de Kosovo, pese a que ambas partes no han llegado a un acuerdo sobre el futuro de este territorio en virtud al plan presentado por el enviado especial de la ONU, Martti Ahtisaari.
En un informe confidencial al que ha tenido acceso Associated Press, una delegación de la UE de 72 miembros, con 200 de personal de apoyo local, tendría el mandato de supervisar la aplicación del plan de la ONU.
Aunque las partes no han llegado a un acuerdo por el momento y el Consejo de Seguridad de la ONU, que será el que tome la decisión última, parece estar dividido, la UE continúa con su preparación para tomar el relevo a la Misión de la ONU en Kosovo (MINUK), compuesta de 3.000 hombres, que desde 1999 gestiona la provincia serbia.
El informe confidencial, que asume la aprobación del plan de la ONU por el Consejo de Seguridad, prevé una transición entre la administración de la ONU y su sucesora europea. Asimismo, estima que la operación costará 18,8 millones de euros en su primer año.
Al contrario que la MINUK, la delegación de la UE no tendrá la responsabilidad directa de dirigir Kosovo, que será competencia de un gobierno local, pero el representante principal de la UE tendrá poder de veto sobre las decisiones gubernamentales y la autoridad de destituir a responsables que obstruyan la aplicación de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.
Además, la delegación de la UE ayudará a las autoridades de Kosovo a elaborar una nueva Constitución. Una unidad política separada supervisará la actuación del Gobierno, mientras que una unidad legal estudiará qué nueva legislación es compatible con la resolución del Consejo de Seguridad.
La delegación de la UE tendrá su base en Prístina con oficinas tanto en Mitrovica, bastión serbio en el norte de Kosovo, y en Belgrado.