Lavrov cree que el ataque químico fue una provocación rebelde

MOSCÚ, 17 (Reuters/EP)

   El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, ha declarado que su Gobierno sigue sospechando que el ataque químico del pasado 21 de agosto fue una "provocación" de los grupos rebeldes, mientras que su homólogo francés, Laurent Fabius, ha advertido de que el informe de los inspectores de la ONU demuestra que fue cometido, "sin duda", por las fuerzas del régimen de Bashar al Assad.

   "Tenemos razones muy serias para creer que ha sido una provocación", ha declarado Lavrov durante una rueda de prensa conjunta con Fabius celebrada en Moscú. Los rebeldes han cometido "muchas provocaciones" a lo largo de los "dos últimos años" con el objetivo de "provocar una intervención extranjera", ha añadido Sergei Lavrov al término de su reunión con Laurent Fabius.

   El encuentro y la rueda de prensa se han producido un día después de la presentación de las conclusiones de los inspectores de la ONU sobre el ataque con gas sarín efectuado el pasado 21 de agosto en la localidad de Ghouta (en las cercanías de Damasco y en poder de los rebeldes), que causó más de 1.400 muertos, según la versión de Estados Unidos.

   Asimismo, el ministro ruso ha afirmado, aunque el informe de los investigadores de la ONU ha demostrado que efectivamente se han utilizado armas químicas, "ha dejado sin responder numerosas preguntas que habíamos planteado", entre ellas si las armas habían sido producidas en una fábrica o eran de elaboración artesanal.

   Lavrov ha asegurado, por tanto, que Moscú discrepa de París y de otros Gobiernos occidentales respecto a la autoría del ataque, pero ha asegurado que Francia y Rusia coinciden en la necesidad de buscar una salida pacífica a la crisis siria, aunque discrepen en la forma de conseguirlo.

   Por su parte, Fabius ha declarado en la misma rueda de prensa que el informe de la ONU es convincente y que, "a la vista de la cantidad de gas sarín, de los vectores y de la tecnología utilizada en el ataque, y de otros aspectos, parece que no hay ninguna duda de que el régimen está detrás de ello".