El líder opositor keniano Raila Odinga anuncia su candidatura a las presidenciales de 2022

MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

El líder opositor keniano y exprimer ministro Raila Odinga ha anunciado este viernes su candidatura a las elecciones presidenciales de 2022 por quinta y posiblemente última vez, dada su avanzada edad, 76 años, y sin el respaldo de sus antiguos aliados de la Superalianza Nacional de partidos de centro-izquierda, disuelta en agosto de este año.

En su lugar, Odinga ha anunciado este viernes el llamado movimiento Azimio la Umoja (Aspiración a la unidad), una especie de colectivo de partidos políticos y líderes afines de la sociedad civil, así como la próxima presentación de un manifiesto que abordará diversas preocupaciones como la corrupción, la deuda pública, la industrialización y la protección de la propiedad privada, entre otras, como pilares de la carrera hacia los comicios del próximo 9 de agosto.

Durante la ceremonia celebrada en el estado de Kasarani, en Nairobi, Odinga ha llamado a una nueva reforma económica para poner al país "al volante de la cuarta revolución industrial en África" en el principio de una campaña, ha prometido, ausente de personalismos.

"No me presento para presidente con la intención de oponerme a nadie, sino para proponer mejores políticas. Estoy en esta carrera para moldear una nación indivisible. No estoy en guerra con las personas: estoy en guerra con ideologías que llevarían a esta nación en la dirección equivocada", ha hecho saber en declaraciones recogidas por el diario keniano 'The Nation'.

Odinga, líder del partido Movimiento Democrático Naranja (MDN) retorna a la carrera presidencial tras su derrota hace cinco años a manos del actual mandatario, Uhuru Kenyatta. El exprimer ministro, tras declarar inválidos los resultados, en los que obtuvo solo un 1 por ciento de los votos, se autoproclamó como "presidente del pueblo" -- un cargo ficticio para eludir el delito de traición --, en el principio de una serie de fracturas dentro de la antigua Súper Alianza que acabaron degenerando en su colapso.

Los antiguos aliados del mandatario también le acusan de incumplir la promesa que hizo antes de las elecciones generales de 2017 por la que aseguró que no volvería a comparecer a unos comicios a la Presidencia.

Odinga declaró inválido su propio compromiso ante la derrota electoral de hace cinco años, y ahora se prepara así para un nuevo episodio de su vida política, marcada por las aspiraciones al poder de la comunidad luo a la que representa y dentro de la compleja relación a tres bandas con Kenyatta y el vicepresidente del país, William Ruto, enemigo declarado del mandatario tras años de concordia.