BANGUI 23 Mar. (Reuters/EP) -
Una columna de guerrilleros de la coalición rebelde Séléka ha llegado a las puertas noroccidentales de la capital de la República Centroafricana, Bangui, con lo que se abre un segundo frente para las fuerzas gubernamentales que defienden la ciudad.
La segunda columna ha atacado y tomado este sábado la localidad de Bossembele, situada a 160 kilómetros al noroeste de Bangui, según ha reivindicado un portavoz de Séléka, Eric Massi, que ha señalado además que la primera columna insurgente se encuentra a 30 kilómetros al noreste de la capital.
"Hemos tomado Bossembele", ha afirmado Massi en declaraciones telefónicas desde París. "En este frente estamos ahora a 100 kilómetros de Bangui", ha explicado.
Vecinos de la zona han informado de violentos enfrentamientos en Bossembele, localidad en la que hay un importante cuartel militar, y una de estas fuentes ha confirmado que los rebeldes han tomado el pueblo. "El pueblo ha caído en manos de los rebeldes. Controlan el pueblo y están por todas partes", ha relatado Jean-Claude Sambia.
Ayer mismo esta segunda columna conquistó la localidad natal del presidente del país, François Bozizé, Bossangoa, a unos 300 kilómetros al noroeste de Bangui. Sin embargo, un portavoz del Gobierno ha asegurado que han hecho retroceder a los insurgentes hasta Damara, a menos de 75 kilómetros al noreste de la capital.
"El Ejército centroafricano está luchando desde esta mañana con los rebeldes entre Damara y Sibut", ha explicado el portavoz gubernamental Crepin Mboli-Goumba. Sibut se encuentra a unos 180 kilómetros de Bangui. Sin embargo, Massi ha asegurado que ya han superado Damara y están a unos 30 de la capital. "Es verdad que perdimos terreno después del ataque de ayer de un helicóptero, pero hemos retomado el avance esta mañana y estamos a las puertas de Bangui", ha indicado.
Mientras, en la capital los comercios han vuelto a abrir sus puertas y el tráfico ha retomado su pulso normal tras el pánico inicial generado tras conocerse la presencia de una columna rebelde.
También el viernes la radio pública informó de que Sudáfrica enviará más tropas al país, un acuerdo alcanzado tras un encuentro entre Bozizé y el presidente sudafricano, Jacob Zuma. Bozizé regresó rápidamente a Bangui después de su visita a Pretoria para, según fuentes militares, comandar personalmente a las tropas apostadas en la ciudad.
Mboli-Goumba ha explicado que las tropas sudafricanas no han intervenido en las hostilidades y continúan acuarteladas en la capital. "Estamos abiertos a las negociaciones. La puerta sigue aún abierta siempre que las demandas de los rebeldes sean razonables", ha indicado Mboli-Goumba.
La coalición Séléka se sublevó en diciembre del año pasado, pero acordó en enero un alto el fuego con el Gobierno de Bozizé, que a cambio se comprometía a integrar a los guerrilleros en el Ejército o la vida civil. Sin embargo, ahora los rebeldes denuncian la pasividad del Gobierno y han anunciado su intención de derrocarlo.