Al menos 66 heridos en la segunda noche de disturbios en Tallin por la retirada de la estatua

Actualizado: sábado, 28 abril 2007 13:15


TALLIN, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

La segunda noche de disturbios y actos vandálicos en Tallin se saldó con 66 personas heridas, entre ellas seis agentes, después de que el Gobierno estonio decidiera retirar una estatua en memoria de los soldados soviéticos caídos en la Segunda Guerra Mundial.

Más de 500 personas, en su mayoría adolescentes, fueron detenidas durante la noche mientras grupos de vándalos recorrieron las calles del centro de Tallin rompiendo escaparates y saqueando tiendas, según la portavoz de la Policía, Julia Garanza.

Los disturbios han venido motivadas por la decisión del Gobierno de retirar la estatua conocida como 'El soldado de bronce' y exhumar a trece soldados soviéticos enterrados junto a ella en el centro de la capital. Los rusos que residen en Estonia --menos de un tercio de los 1,3 millones de habitantes-- consideran el monumento como un santuario a los soldados del Ejército Rojo que murieron luchando contra los nazis, pero los estonios lo ven como un recordatorio del medio siglo de gobierno soviético.

En la primera noche de enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, el jueves, una persona murió y otras 56 resultaron heridas, entre ellas doce agentes. Los disturbios son los peores que vive el país desde que se independizó de la Unión Soviética en 1991 y han suscitado preocupación en la Unión Europea, de la que Estonia es miembro desde 2004.

Las autoridades han instado a la población a que mantengan la calma y el orden y la Policía ha solicitado a los padres que vigilen estrechamente a sus hijos.

La decisión del Gobierno estonio ha generado el malestar de Moscú. Ayer, el ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, criticó la decisión de retirar el monumento y la intervención policial contra los "manifestantes que intentaban proteger el santuario y la memoria de los libertadores de Europa del nazismo". Asimismo, según recoge RIA Novosti, dijo no "entender los intentos de equiparar comunismo con nazismo".

Por su parte el ministro de Comercio ruso, German Gref, dijo que la actual situación perjudicará las relaciones económicas entre Rusia y Estonia. "Es obvio que habrá un deterioro en las relaciones políticas y como consecuencia en las económicas" entre los dos países, afirmó

Entretanto, las autoridades rusas han enviado refuerzos para proteger la Embajada estonia en Moscú y el consulado en San Petersburgo. Durante la noche, unos 300 manifestantes se concentraron ante la legación diplomática en la capital para protestar por la decisión de Tallin.

El ministro estonio de Exteriores, Urmas Paet, transmitió a su homólogo ruso su preocupación por los incidentes ante la Embajada y pidió que se refuerce la seguridad. Por su parte, la embajadora estonia en Moscú, Marina Kaljurand, calificó de "chantaje" la amenaza de Moscú de romper las relaciones con Tallin. "Consideramos que la ruptura de relaciones diplomáticas es una medida infundada", afirmó, defendiendo la soberanía de Estonia en su actuación y advirtiendo de que "no escucharemos el chantaje de otros países y las amenazas".