MÉXICO DF 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El gobernador del estado de Tlaxcala, Mariano González Zarur, ha confirmado este viernes que trece personas han muerto y 154 han resultado heridas en una explosión causada por la caída de un cohete en un camión repleto de material pirotécnico en la localidad de Nativitas.
El estallido se ha producido al paso de una procesión en la que participaban todas las víctimas mortales. Nueve perecieron en el acto, mientras que cuatro han muerto poco después en los hospitales de los estados vecinos de Puebla y Distrito Federal.
Entre los heridos, 80 han sido dados de alta al no presentar lesiones graves, según ha precisado González Zarur, que ha declarado tres días de luto en el estado de Tlaxcala por el suceso ocurrido en la procesión en honor al santo Jesusito.
Gónzález Zarur ha agradecido en una rueda de prensa la pronta ayuda de las autoridades federales y estatales mexicanas para la atención y el traslado de los heridos.
En un principio, el Centro de Emergencia y Respuesta Inmediata había elevado dicho balance a quince fallecidos y más de un centenar de heridos, según informaron medios locales. Posteriormente, el gobernador de Tlaxcala lo había elevado a once debido al complejo recuento de cadáveres.
No es la primera ocasión que se registran este tipo de incidentes en procesiones religiosas, donde abundan los fuegos artificiales y el uso de material pirotécnico y que habitualmente se saldan con varios heridos.
REACCIÓN OFICIAL
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, ha expresado su pésame a los familiares de los fallecidos y ha lamentado el "terrible" accidente ocurrido en Nativitas, en el sur del país.
"Los heridos tras la explosión en Tlaxcala podrán recibir apoyo en el Centro Nacional de Investigación y Atención de Quemados", ha escrito Peña Nieto en su perfil en la red social Twitter.
"Dependencias del Gobierno de la República trabajan ya en coordinación con la autoridad estatal para atender oportunamente a los heridos", ha añadido.