MSF alerta de la situación de miles de desplazados en el sur de la RCA

Vehículo de Médicos Sin Fronteras en Kouango, en República Centroafricana
JANA BRANDT/MSF
Actualizado: jueves, 16 abril 2015 21:12

MADRID, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -

Los choques entre milicias rivales que sacudieron en 2014 la zona de Kouango, en el sur de República Centroafricana, llevaron a unas 20.000 personas a huir a República Democrática del Congo y a varios miles más a las localidades de Bambari y Grimari, al norte de Kouango.

Médicos Sin Fronteras (MSF) ha iniciado una intervención de emergencia para proporcionar atención primaria y de urgencia a estas miles de personas que se han quedado atrapadas tras meses de muertes, destrucción y saqueos, en muchos casos sin siquiera vivienda.

Además, el acceso a la atención sanitaria es limitado y la población local sufre graves carencias de agua y saneamiento, ha advertido la ONG en un comunicado.

La coordinadora del equipo de la ONG, Jana Brandt, ha asegurado, aunque siguen registrándose "algunos choques armados", a veces "un simple rumor" basta para espantar a la población local. "La gente está viviendo en condiciones muy duras que pueden incluso empeorar en cualquier momento si se mantiene la inseguridad", ha añadido.

Brandt ha descrito zonas en las que todo lo que se ve son "casas quemadas" y ha apuntado que "la gente se esconde en el bosque por miedo a la presencia de los grupos armados". La situación podría empeorar con la llegada de la estación lluviosa, toda vez que "la gente que vive a la intemperie está totalmente expuesta a los aguaceros".

"TERRIBLE MEZCLA"

La coordinadora del equipo de MSF ha apuntado que el caso de Kouango es "un ejemplo de la situación que cientos de miles de personas sufren en República Centroafricana cada día". El país, ha agregado, sufre "una terrible mezcla de violencia, desplazamiento y falta de acceso a la atención sanitaria más elemental".

A estos problemas se suman unas infraestructuras deficitarias que complican el comercio y la llegada de suministros y la ocupación, por parte de milicias armadas, de zonas tradicionalmente usadas por los pastores nómadas. "Con este escenario es previsible que se produzca una situación de inseguridad alimentaria a medio plazo", ha avisado Brandt.

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